Lin y Rubio, dos estrellas en ascenso

Jorge Álvarez

DEPORTES

«Estoy muy orgulloso y contento», dijo Ricky sobre el encuentro del «All-Star»

24 feb 2012 . Actualizado a las 05:21 h.

Convertidos en dos de las grandes revelaciones de la liga, Jeremy Lin y el español Ricky Rubio participarán mañana en el denominado «reto de estrellas en ascenso» con el que dará comienzo en Orlando el All-Star de la NBA.

Lin, de 23 años, se ha ganado la categoría de fenómeno desde que recibió la titularidad en los Knicks el 4 de febrero, lo que obligó a incluirlo en el desafío, que este año cambió el formato, pues anteriormente competían los de nuevo ingreso (rookies) frente a los de segundo año, (sophomores).

Inicialmente, el comisionado, David Stern, dijo que el reciente astro de los Knicks no integraba el pool de 18 jugadores del cual saldrían los elegidos al encuentro. Pero la presión fue «in crescendo» y hasta Charles Barkley, quien dirigirá una de las escuadras, tildó de estupidez excluirlo de la lid.

Como solución se elevó de nueve a diez el número de participantes por equipo, con el propósito de concederle la plaza a Lin y el también base Norris Cole, de Miami Heat, recibió idéntica oportunidad para completar la veintena de participantes.

Nacido en California, pero hijo de padres taiwaneses, Lin acumula cifras que no ha alcanzado ningún otro debutante en los diez primeros encuentros desde que se fusionaron la NBA y la American Basketball Association (ABA) en 1976.

En ese corto período Lin promedia 26,3 tantos, 4,3 rebotes, 10,1 asistencias y 2,7 robos, que propiciaron una serie de siete triunfos en línea, aún sin la presencia de Carmelo Anthony, lesionado, ni de Amare Stoudemire, quien tuvo que dejar el plantel por el fallecimiento de su hermano.

«Voy a tratar de disfrutar ese partido al máximo», dijo Lin.

«Nunca pensé que tendría esa posibilidad y ahora se hizo realidad estar al lado de los jóvenes con mayores perspectivas en la liga».

Por su parte, Rubio, de 21 años, promedia 11,3 puntos, 4,3 rebotes, 8,4 asistencias y 2,4 robos de balón en 34 partidos con Minnesota Timberwolves, los últimos 24 como integrante del quinteto abridor.

«Estoy muy orgulloso y contento», dijo Rubio sobre el encuentro.

«Siempre he visto ese espectáculo por televisión y ahora he tenido la suerte de que lo podré vivir, y voy a disfrutarlo al máximo».

A pesar de ser un novato foráneo, Rubio es recibido en cada desafío como un ídolo por los fanáticos del Target Center de Minneápolis, donde brilla con precisos pases, certeros tiros y sentido colectivo.

«Lo único que no sabíamos sobre Rubio es que es un competidor», dijo el entrenador de los Wolves, Rich Adelman. «Posee una habilidad especial, muy especial».