Aparca la práctica de faltas por la acumulación de encuentros y de bajas: «Es por precaución, con tanto partido junto lo importante es recuperar bien», explica
17 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.«Juca, Juca», gritaba Riazor el miércoles cuando el brasileño se disponía a lanzar un libre directo. En el recuerdo de la afición estaban sus maravillosos friquis ganadores al Jerez y al Villarreal. Dos veces resonó ese grito de ánimo contra el Valencia. El resultado no fue el esperado: lanzó la primera a la barrera che y la segunda le salió centrada y por encima del larguero. El pivote aún no ha recuperado el toque que lo distinguió, ese que afinó con largas sesiones de tiro en Abegondo al acabar los entrenamientos. Desde que se lesionó por primera vez ha dejado aparcadas esas prácticas de disparo.
Un edema intramuscular lo paró el 27 de septiembre contra el Villarreal, unos minutos después de anotar el gol del triunfo. Volvió el 5 de diciembre contra el Barça para disputar la última media hora, pero sufrió un golpe en el tobillo en una disputa con Sergio Busquets y no volvió a jugar hasta el pasado miércoles.
Calendario apretado
Aunque los médicos no llegaron a relacionar esas sesiones maratonianas de tiro con sus dos lesiones encadenas, ¿es este el motivo de que haya dejado de practicarlas? No. La causa es otra, aunque también tiene que ver con la precaución. «Ahora tenemos un partido detrás de otro, así que mejor dejamos las faltas para cuando tengamos un poco de más tiempo, y podamos recuperar un poco más. Es una medida de precaución», explica. Asegura que volverá a ensayarlas «con normalidad cuando haya mejores condiciones, tanto de calendario como de bajas en el equipo, porque no nos podemos permitir más y hay que arriesgar lo mínimo».
Considera que esos ensayos son el secreto de su éxito: «Practicar las faltas es algo que hago porque me gusta y porque tengo que hacerlo para después poder lanzarlas bien en los partidos, es fundamental», afirma.
Físicamente asegura estar plenamente recuperado: «Me encuentro bien, espero volver a tener el estado de forma de antes de la lesión. Las molestias se fueron, no tengo ninguna».
Una vez recuperado, Lotina lo alineó de titular. La del Valencia era su primera convocatoria tras su última lesión y ya jugó de inicio. Hoy volverá a figurar en el once, según lo ensayado ayer por el técnico, que en un momento de la sesión trabajó aparte con los defensas, Antonio Tomás y el brasileño. «Nos dio consejos tácticos muy interesantes. Nos pide que juguemos juntos como venimos haciendo para no ser sorprendidos. Quiere un equipo compacto».
Elogia la solidaridad y el despliegue físico del equipo, y pronostica que siguiendo esta línea los resultados serán aún mejores. «Estamos haciendo un sacrificio muy grande, pero podemos hacer mejores partidos, tenemos espacio para crecer más».
Quien crece a pasos de crac es su compatriota Filipe. «No me sorprende nada lo que estoy viendo. Sabía de la calidad que tenía antes de venir aquí. Y me la está confirmando. Tiene la posibilidad de ir a un Mundial y, como siga así, seguro que va. Es fundamental para nosotros, en cualquiera de las funciones que tiene, y seguro que va a ayudar mucho a la selección. Está en un gran momento, y tenemos que aprovecharlo al máximo».