Tras el susto inicial, la lesión de Bodipo, que se dolió de su rodilla tras la entrada de un rival en el tramo final del partido, se quedó en un susto. Fue más importante el fuerte golpe que Lopo se llevó en una ceja durante los instantes previos a que el árbitro pitase el final de la primera parte. El central fue atendido en el descanso y pudo jugar la segunda parte sin problema alguno.
El mexicano Andrés Guardado advirtió de que ni él ni sus compañeros se creen que ocupen la cuarta posición del campeonato: «Aún falta toda la jornada del domingo y ahora solo podemos pensar en seguir esta buena racha en casa».
Aranzubia declaró que el triunfo de ayer debe devolver la alegría al equipo y a la afición. «Doce puntos de dieciocho es una buena marca y ahora nos toca disfrutar, pero con los pies en el suelo, porque solo significa que estos puntos ya los tenemos y que no los tendremos que sumar luego», explicó antes de advertir, como su entrenador, de que el Dépor aún puede jugar mejor al fútbol. «Claro que somos capaces de hacerlo más bonito, pero hay que entender que el calor y el rival nos apretaron mucho, así que el juego no fue vistoso», reflexionó el portero riojano.
También Pablo Álvarez se reconoció contento con el triunfo, aunque no así con su rendimiento personal: «Tengo que ir a más, no estoy teniendo ocasiones y debo seguir trabajando duro».