Muere la actriz Lauren Bacall a los 89 años

La Voz MATEO SANCHO CARDIEL | EFE

CULTURA

La actriz debutó en el cine de la mano de Bogart con 19 años en «Tener y no tener» y se convirtió en su pareja dentro y fuera de la pantalla

13 ago 2014 . Actualizado a las 14:26 h.
Una de las últimas grandes damas del cine, la célebre actriz Lauren Bacall, estrella de la edad dorada de Hollywood, ha fallecido en su domicilio neoyorquino a la edad de 89 años, noticia que confirmó en Twitter la cuenta oficial de la entidad que gestiona el legado de Humphrey Bogart, actor con el que se casó en 1945. «Con profundo dolor por la magnitud de nuestra pérdida, y con una inmensa gratitud por su increíble vida, confirmamos la muerte de Lauren Bacall», decía el tuit que volvió a confirmar esa macabra ley que reza que las estrellas nunca se van solas. Si Robin Williams conmocionaba este martes a Hollywood en una muerte que apunta a suicidio, como una estrella que colisiona, Lauren Bacall se fue como un astro que se extingue de manera natural, después de haber sufrido esta mañana un derrame cerebral, según confirmaron fuentes cercanas a la familia.Laurent Bacall, nacida el 16 de septiembre de 1924 en el Bronx (Nueva York) con el nombre de Betty Joan Perske, tenía sangre judía polaca (era la prima de Shimon Peres) y rumana, y superada una inicial vocación de periodista, enfocó su carrera a la interpretación. «Nunca fui adolescente», le explicó a Terenci Moix en una entrevista en la que se definió como «muy vulnerable y muy insegura». Ninguna inseguridad tuvieron los de la Warner Brothers en cuanto vieron su sinuoso físico, su mirada felina y una voz como si hubiese nacido con un cigarrillo y un whisky con hielo. De inmediato le reservaron una entrada por todo lo alto como «mujer fatal» de Bogart. Howard Hawks fue el que le propuso que se llamara Lauren. Y Bacall era el apellido de su madre.Lauren Bacall debutó en el cine de la mano de Bogart cuando tenía 19 años en Tener y no tener (1944) y se convirtió en su pareja dentro y fuera de la pantalla. Mientras estaba promocionando en Nueva York la que era su primera película, el dramaturgo Moss Hart se le acercó y le dijo: «Te das cuenta, por supuesto, que a partir de ahora solo puedes ir hacia abajo, ¿verdad?».Hart se equivocó. Lauren Bacall, «la flaca» como se la conocía en Hollywood, tenía mucho más que decir que aquel diálogo en el que le propinaba a Bogart como una cariñosa bofetada: «No tienes que actuar conmigo. No tienes que decir nada ni hacer nada. O tal vez, solo silbar. Sabes cómo silbar, ¿verdad Steve? Solo junta los labios y silba».En 1945, Lauren Bacall contrajo matrimonio con Bogart y fue su esposa hasta la muerte del actor en 1957. Tras el explosivo debut llegaron tres películas más: El sueño eterno (1946), con guión de Raymond Chandler; La senda tenebrosa» (1947), de Delmer Daves, y Cayo Largo (1948), de John Houston. Lauren Bacall sin BogartLa temprana muerte del intérprete de Casablanca por un cáncer de esófago la convirtió en con 32 años en la viuda de Hollywood y la duda surgió en el celuloide: ¿existe Bacall sin Bogart? Lauren Bacall siempre reconoció su prioridad como esposa que como estrella y se rió de esa imagen proyectada en su primera etapa. «Si hay algo que nunca he sido ha sido misteriosa, y si hay algo que nunca he hecho, ha sido no hablar», reconocería la actriz. A pesar de ello, la filmografía de Lauren Bacall incluye los títulos El trompetista (1950), con Kirk Douglas y Doris Day, Como casarse con un millonario (1953), con Marilyn Monroe y Betty Grable y Asesinato en el Orient Express (1974).Lauren Bacall también coprotagonizó varias películas con John Wayne y compartió rodaje con muchos de los galanes de la época como James Stewart, Rock Hudson, Gary Cooper, Gregory Peck, Tony Curtis y Paul Newman. Lauren Bacall, que tuvo tres hijos, se casó en segundas nupcias con Jason Robards en 1961, aunque se divorció en 1969. Entre la muerte de Bogart y su segundo matrimonio, tuvo una relación de transición con Frank Sinatra, el hombre del que dijo que le gustaría «que se callara y cantara».«Por fin, ¡un hombre!»Fue galardonada en 1997 con un Globo de Oro como mejor actriz secundaria por El amor tiene dos caras, y a lo largo de su carrera recibió dos premios Tony de teatro y el Premio Donostia del Festival de San Sebastián (1982). El que se le resistió fue en Oscar. Cuándo ya todos creían que solo estaba para consechar premios honoríficos, Lauren Bacall pidió una nueva prórroga y, con un coqueto papel de anciana en El amor tiene dos caras, de Barbra Streisand, fue nominada por primera vez al Oscar en 1997. Todo el mundo daba por hecho que se llevaría la estatuilla, incluida Juliette Binoche, la que finalmente ganó. Y, si bien la actriz dio la peor interpretación de su carrera al intentar disimular la decepción de su derrota (su hijo, directamente, abandonó la sala), su carrera se revitalizó.«¿Qué significa eso de mi edad? ¿Qué edad? Trabajar no es cuestión de edad. Seguir trabajando significa seguir con vida», le respondió Lauren Bacall a un periodista en Berlín al presentar The Walker, una interesante intriga de Paul Schrader en la que seguía mostrando su atractivo octogenario. Sus últimas intervenciones fueron muy escogidas pero exquisitas, con nombres tan poco clásicos como Lars Von Trier (en Dogville y Manderlay), en un exquisito cortometraje dirigido por Natalie Portman (Eve). Su última película fue Ernest & Celestine, una cinta de animación estrenada en el 2012 en la que prestaba su voz a un personaje. Y cuando en el 2009 Hollywood le dio por fin el Óscar honorífico, Lauren Bacall solo dijo: «por fin, ¡un hombre!».