A Coruña negocia la segunda visita a Galicia de la banda Sonic Youth

CULTURA

El grupo tocó con Jim O'Rourke en el 2000 dentro del primer festival Santirock y dio un recital soberbio

01 feb 2010 . Actualizado a las 14:55 h.

Diez años después de su histórico concierto en el festival Santirock del 2000, los neoyorquinos Sonic Youth podrían volver a tocar en Galicia. El 23 de abril sería la fecha en la que la banda se subiría al escenario del Coliseum de A Coruña, de prosperar las negociaciones que la empresa Live Nation mantiene con la promotora viguesa Sweet Nocturna y el Ayuntamiento de A Coruña.

Fuentes próximas a Live Nation indican que, en estos momentos, el concierto cuenta con un «97% de posibilidades» de que se lleve a cabo. Únicamente existe un escollo: el compromiso que uno de los nuevos miembros que han entrado en la banda el año pasado, Mark Ibol, tiene con el Festival de Coachella, que también se celebra en el mes de abril en California.

El día 18, Mark Ibol toca en el evento americano con su banda de procedencia, Pavement, que actualmente está embarcada en la gira de su reunión. Este hecho, ha obligado a Live Nation a reconsiderar las fechas de sus conciertos españoles. Además de en A Coruña, el grupo tocaría también días antes en Barcelona y Madrid. Por ello, puede que la falta de tiempo obligue a un reajuste en las fechas. De ahí, las reservas de las partes en dar por cerrado totalmente un acuerdo que esta misma semana se daba ya por hecho.

Momento dulce

Sonic Youth, que está considerado como uno de los grandes baluartes del rock alternativo americano, llegará a Galicia en un momento dulce. Tras algunos trabajos discutidos por una parte de sus fans, la salida de The Eternal en el 2009 ha vuelto a enamorar a los desencantados. Se trata de su mejor álbum en los últimos 15 años y una lección de estilo que ha contado con el refrendo casi unánime de la crítica especializada.

Kim Gordon (bajo), Thurston Moore (guitarra) y Lee Ranaldo (guitarra) fueron el núcleo creador de Sonic Youth a principios de los ochenta. Steve Shelley, su excepcional batería, no entraría hasta 1985 perfilando la formación que, con algunos agregados, se mantiene fija hasta día de hoy. A partir de entonces, grabaron álbumes fundamentales como Evol (1986) y Sister (1987), que progresivamente fueron introduciendo elementos pop a su discurso experimental.

El punto de inflexión llegó con Daydream Nation (1988), una obra maestra absoluta que incluye algunos de sus temas más emblemáticos. Himnos como Teenage Riot y Eric's Trip con su sonido mate y oscuro marcaron el canon del indie-rock, que convirtió a la banda en el gran icono de la explosión alternativa que EE.?UU. estaba viviendo entonces. Los excelentes Goo (1990) y Dirty (1992) asentaron esa privilegiada posición.