El edificio número 4 de la calle Emilio Martínez Sánchez continúa recibiendo la visita de técnicos municipales y provinciales para estudiar los posibles daños en su estructura después de la acumulación de agua en sus cimientos. Todo apunta a que la causa se debe a las obras ejecutadas hace cinco años para construir aceras en esta vía, así como renovar la iluminación. El Ayuntamiento de Curtis señaló a este diario que «la Diputación es la titular de esta vía, y fue la Diputación, no el Concello, quien ejecutó las obras de la acera a través del Plan de Travesía. La Diputación elaboró el proyecto, licitó y adjudicó la actuación».
Pero la Diputación, donde el alcalde de Curtis, Javier Caínzos, ocupa un escaño como diputado en los dos primeros años de este mandato, negó ser el responsable de la redacción del proyecto. De hecho, en una de las primeras páginas de la voluminosa redacción se lee lo siguiente: «El Concello de Curtis encarga al ingeniero de Caminos que suscribe, la redacción del presente proyecto de seguridad vial, renovación de aceras y alumbrado en la CP-3201 a su paso por el núcleo de Curtis (calle Emilio Martínez Sánchez)». El ingeniero es Manuel Ángel Pisos Veiga, el mismo que redactó cuatro años después el «Plan de Mellora de Seguridad Vial en la carretera O Mascoto-Penedo de Rendal, acceso a Cabana de Vilarullo, camino acceso a Mandeo y rúa Paseo Fluvial», también en el término municipal de Curtis.
De este modo, la Diputación se desmarca de la afirmación de haber elaborado el proyecto de la polémica obra que sí financió.