«No paramos de vender pilas y afeitadoras»
El bazar Lagares, en Rúa Nova, tuvo colas frente a su puerta durante todo el día. Fue abrir y «encher». Fue un gran día para María Gajino. Ya no por las ganas que tenía de volver a funcionar, sino por lo bien que le fue la jornada. «No nos esperábamos que fuese así. Pensábamos que iríamos poco a poco», dice; si bien reconoce que todavía queda mucho para recuperar el volumen de negocio que tenían antes del estado de alarma. El bazar es especialista en venta de material electrónico y relojes. Pero lo que más se despachó fueron pilas para todo tipo de aparatos y máquinas de cortar la barba o el pelo, cuenta María. «Son artículos que tras el cierre se convirtieron en productos de gran necesidad».
«Como buen superviviente, uno no se puede venir abajo ahora»
North Vivor es una tienda de artículos de supervivencia y es la única de Galicia que organiza cursos de este tipo. Roberto Orosa y su socio inauguraron su negocio «dos semanas antes de que se decretase el estado de alarma» y este lunes no se lo pensó ni un minuto. «Había que abrir. Aquello que hicimos con tanta ilusión y ver que cerrábamos sin saber fecha de vuelta fue un golpe moral muy fuerte». Pese a todo, no les ha ido mal. La venta online funcionó estas últimas semanas y Roberto trabajaba ayer en reponer lo vendido en Internet. Ahora que pasó lo peor del temporal, «como buen superviviente, uno no se puede venir abajo. Hay que pensar cómo mejorar. Para sobrevivir, lo más importante es que la cabeza funcione. Es lo primero que aprende un superviviente que queda abandonado herido en un bosque. Si no haces nada, te mueres».