Los asistentes a un cuerso sobre el monumento realizaron acudieron a la visita guiada
20 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Con una mayor presencia de vigilantes y la Guardia Civil haciendo rondas por el entorno, los asistentes al seminario Arredor do pazo de Meirás: Historia ou presente? entraron ayer en el monumento y salieron con la idea de haber realizado lo que denominaron «unha viaxe no tempo antes de que desapareza», en alusión a la espera de un nuevo rumbo en la propiedad del BIC que el Estado ya ha reclamado para sí judicialmente.
Los veteranos reconocían que todo seguía igual y que pese a las novedades de los abogados del Estado que esgrimen un acta notarial que entienden que corrobora la venta fraudulenta de la propiedad ahora en manos de la familia del dictador, el mensaje del guía sigue teniendo la impronta de la Fundación Franco. Los más jóvenes se mostraban sorprendidos por el cartel sobre el «genocidio católico» existente en el interior, «una biblioteca sin libros» y de que albergue piezas del Pórtico de la Gloria.
«Generalísimo ou don Francisco» es el trato que recibe Franco por parte del guía Fernández Barallobre, cuestión que destacan los visitantes, que reconocen que también hay referencias a Pardo Bazán.
Tras dos jornadas en donde se analizó el simbolismo de Meirás e incluso qué hacer con los lugares de la memoria de los dictadores, los estudiantes preguntan por temas desconocidos para muchos, pese a que son historia reciente. Tras salir del pazo se les habla del muro que se construye en el 38, incluso antes del cambio en la titularidad de las parcelas, de las garitas construidas en los cincuenta por el Ministerio del Ejército y del acuartelamiento existente en donde ahora se levanta una urbanización. «Co agravante de que o acuartelamento se constrúe no 44, primeiro con barracóns, que elevan o ano seguinte para meterlles soto, gastando cantidades inxentes e os catro e cinco anos deciden facer un cartel novo, en uso ata os oitenta, e todos os anos hai investimentos moi importantes, pero en canto deixa de ter uso a familia consegue esa recalificación», explica el historiador Manuel Pérez, coautor de un libro sobre el expolio de Meirás.
Núñez Seixas: «Estamos satisfeitos»
Xosé Manoel Núñez Seixas, presidente del Comité de Expertos sobre el pazo, reconoció en Meirás que están «orgullosos do traballo feito» y cree, sobre la demanda del Estado, que «só queda agardar, pinta ben, pero non son adiviño». «Ogallá todo vaia como agardamos a maioría da sociedade galega», dijo. Indicó que el acta notarial que apareció «da unha constancia a maiores de que a transacción foi irregular». «Estamos satisfeitos e pensamos que pinta ben, pero hai un longo treito», reconoció y cree que Meirás sienta un precedente, que entiende que da pie a la petición de Cádiz sobre la casa del general Varela.