Ara Malikian: «La música de Bach se puede tocar también con vaqueros»

Javier Becerra
Javier Becerra A CORUÑA

A CORUÑA

El violinista armenio  que actúa hoy en el Colón aboga por romper las barreras entre la alta y la baja cultura

12 mar 2015 . Actualizado a las 17:23 h.

Ara Malikian (Beirut, 1968) lleva ya 15 años viviendo en España. Y lo está celebrando con una gira de conciertos en los que repasa toda su trayectoria. «En mi carrera hay un poco de todo. Hay mucho clásico, pero también músicas del mundo, rock o flamenco».

-¿Se siente cómodo dentro de la etiqueta de inetiquetable?

-[Risas] Es así, yo no sé cómo definirme. Me gusta tocar de todo. Soy como un niño que ve algo y quiere cogerlo en la mano. He tenido la suerte de viajar mucho y de tomar cosas de otros géneros y otras culturas. Para mí tocar el concierto de Chaikovski 800 veces me motiva menos que aprender del flamenco, la música hindú o la japonesa.

-¿La música es un juego o una disciplina?

-Las dos cosas. No puedes jugar si no tienes disciplina. Hacer música para vivir de ella necesita mucho sacrificio. En mis años de juventud he dedicado entre 10 y 12 horas diarias a estudiar. Ahora mi trabajo es diferente. Sigo practicando y estudiando, pero me inclino más por la investigación y buscar nuevo caminos.

-¿Comparte la idea de la música clásica como algo de élite?

-No, para nada. No solo es una inquietud mía, sino de muchos músicos y programadores. Les preocupa a dónde va su público, que cada vez es menor. Hay que encontrar el porqué y el fallo no es la música, que es hermosa. Quizá hay que darse cuenta de que vivimos en otra época y que se debería cambiar la manera de presentar un concierto de música clásica. No puede ser igual que hace 150 años.

-¿Cómo lo hace usted?

-Yo soy como soy, no me voy a disfrazar porque voy a tocar clásica. La música de Bach se puede tocar también con vaqueros.

-¿Qué le sugiere la alta cultura y la baja cultura?

-Pienso que no hay diferencia. A mí me espanta esa idea de música clásica como música culta. Todas las músicas son cultas y, bien hechas, son arte. La clásica, el rock, el pop, el heavy y todo.

-¿Dónde prefiere tocar en un auditorio o en una taberna?

-Los dos sitios se complementan. Tengo la suerte de poder tocar en ambos perfectamente. Cada uno tiene su encanto, su importancia y su público. Me quedo con los dos.

-Dijo alguna una vez que en los conservatorios no formaban a artistas, sino a técnicos.

-Pienso lo mismo. En mi época los profesores querían que los alumnos tuviesen una técnica y, luego, que unificásemos nuestra personalidad lo más posible. Por desgracia, en los conservatorios cuando alguien hace algo diferente, aunque se equivoque, no está muy bien visto. Un artista tiene que equivocarse para encontrar su propia voz.

-¿Fue un rebelde?

-No, pero lo cierto es que encontré mi propia voz después de hacer mis estudios. Me liberé.

-Versiona a Radiohead. ¿A un fan de ellos le gustará usted?

-Yo espero que sí. Radiohead me encantan. Toco temas suyos, pero también de Led Zeppelin, Tom Waits o Björk. Me gusta todo.

Teatro Colón

Horario: 21.00 horas.

Entradas: desde 19 euros.