Gustavo Cabral vive sus mejores días en Vigo. Por juego y por estadística, ya que solo se ha perdido la contienda con el Betis en todo lo que va de año. «Creo que estoy en mi mejor momento en Vigo, me siento cómodo, me siento bien y con confianza y creo que me están saliendo las cosas», comentó el futbolista.
Para él, es el premio al trabajo de dos años en el Celta: «Esto es día a día, no aparece ahora de repente, sino que viene desde que estoy aquí, trabajando y currando para que todo salga bien». Tal es su nivel de confianza, que en Elche apareció en ataque en el segundo palo para rematar un ataque celeste. «Me sorprendió la pelota porque tenía a muchos compañeros delante», recordó del balón que terminó enviando al lateral de la red.
Hasta entonces, si alguien ha tenido difícil asentarse en estas dos temporadas ha sido el central cedido por el Arsenal de Sarandí, siempre ha pagado los plato rotos. Sin embargo, ahora también se ha ganado las segundas oportunidades como el resto de sus compañeros. Sucedió dos semanas atrás, cuando después de ser relevado en el descanso de El Madrigal volvió a la titularidad ante el Getafe. «El míster está confianza en mí», resume.
Órdago al Atlético
Ahora espera continuar en el once ante el Atlético, en un partido en donde ganar a un grande se ha convertido en el nuevo reto del vestuario celeste: «A eso apuntamos. Necesitamos puntos y ahora queremos recuperar los puntos de Elche en casa y si puede ser de a tres, mucho mejor».