Luis Enrique: «Ser entrenador no me apasiona»

EFE

GRADA DE RÍO

El técnico asturiano del Celta admite que disfrutaba más en su etapa como jugador

16 ene 2014 . Actualizado a las 23:43 h.

Luis Enrique, entrenador del Celta de Vigo, recuerda, en una amplia entrevista concedida a Celta TV, cómo fueron sus inicios en el Sporting de Gijón, su llegada al Real Madrid y su posterior fichaje por el FC Barcelona, además de confesar que «con 17 años jamás pensé que iba a vivir del fútbol».

«Yo, por ejemplo, no fui internacional jamás antes de la sub-21. Aquí veo en la cantera del Celta muchos jugadores ya sub-14, sub-15. Pues no sé si será mejor o peor. Porque es un proceso que el jugador tiene que asimilar. En mi caso fue súper beneficioso», apunta Luis Enrique.

«Yo fui internacional sub-21 cuando ya había jugado en Primera División. Y luego me hinché a ser internacional sub-21 y fui muchas veces internacional absoluto. O sea que paciencia. No presionen a los niños y déjenlos que disfruten», explica Luis Enrique.

El exfutbolista de Real Madrid y Barcelona, entre otros clubes, admite que se lo ha pasado «muy bien» jugando al fútbol a pesar de que la profesión conlleva perderse algunas cosas como pueden ser «las juergas» o «las salidas nocturnas» durante la juventud.

«Es una vida maravillosa, además de ser reconocido públicamente y de que hay una compensación económica, hay una serie de cosas que vives cuando eres joven que son impagables. Y hay otra serie de cosas que no puedes vivir, como son las juergas y las salidas nocturnas. O las vives pero a una intensidad muy diferente y solo en momentos puntuales de la temporada, en verano, cuando uno puede. Pero en general, repetiría mi vida como jugador cien veces. Guardo experiencias y recuerdos guapísimos», insiste.

Luis Enrique, que no concede entrevistas individuales a los medios de comunicación, no eludió ningún tema. Incluso habló de su paso por el Real Madrid, una etapa de la que asegura guardar «un buen recuerdo».

«Quizás el último medio año fue el más difícil, en el que hubo más polémicas. Quizás estaba ya mucho más preparado porque había madurado muchísimo. Pero del Madrid tengo un buenísimo recuerdo del club, un recuerdo maravilloso de mis compañeros. Fueron años que me sirvieron para curtirme», afirma.

Reconoce además que su adaptación al vestuario del FC Barcelona fue «mucho más fácil» porque allí tenía «un amigo íntimo» como el Pitu Abelardo y otros «amigos» con los que había coincidido en la selección española como Sergi, Ferrer o Pep Guardiola.

Luis Enrique desvela que no le gusta «la fama» ni ser «popular», por eso decidió «apartarse» del fútbol cuando se retiró como jugador y marcharse seis meses a vivir a Australia.

Asimismo, revela que tras sacarse el título de entrenador nacional la única oferta que recibió fue la del filial del Barcelona, aunque varias veces insistió en que ser entrenador no es algo que le apasione.

«Al principio me generaba muchas dudas la profesión porque es bastante compleja si quieres tener relativa influencia sobre el jugador. Pero a medida que he ido quemando etapas, me ha ido gustando. Pero no me vuelve loco, no me apasiona. No es como ser jugador. Esto está muy bien pero hay muchas cosas de esta profesión que no me gustan», indica.

«A día de hoy, no tengo ningún objetivo como entrenador de ganar no sé qué títulos o de ser el mejor entrenador de no sé qué. Intento ser el mejor entrenador de mi propia versión allí donde esté. Tampoco puedo garantizar que vaya a entrenar muchos años. Y que me siga tomando años sabáticos no lo descarto en ningún caso», agrega.

Se define como un entrenador «muy exigente» y «cercano» a los futbolistas, al mismo tiempo que señala que su pasado como jugador le ayuda a la hora de saber manejar el vestuario.