Dice que no hay tiempo para revoluciones y que reclamará más intensidad
20 feb 2013 . Actualizado a las 03:30 h.Abel Resino ya ejerce como entrenador del Celta. Afronta su nueva etapa como un «reto bonito y difícil» que encara con una «gran plantilla». Aseguró encontrarse un vestuario «con buena gente, predispuesta y consciente de que tienen que asumir su parte de culpa».
Abel Resino no avanzó demasiado respecto al Celta que se verá a partir de ahora, limitándose a decir que «seguiremos la línea de trabajo quedándonos con lo bueno y buscando algo más. Las revoluciones no son buenas, ni hay tiempo». Eso sí, tiene claro que quiere un Celta «mucho más fuerte e intenso» durante los 90 minutos.
«Cuando me llamó el Celta rápidamente nos pusimos en contacto. Somos conscientes de que es un reto difícil pero nuestro objetivo es intentarlo todo hasta el último minuto, para que este gran club siga gozando de la Primera división», afirmó Abel Resino en la rueda de prensa de su presentación.
El entrenador toledano, que la pasada temporada logró salvar al Granada del descenso a Segunda en la última jornada, aseguró encontrarse un vestuario «con buena predisposición» pero advirtió que para lograr el objetivo deberán subir el «nivel de competitividad» del equipo. «El Celta tiene una muy buena plantilla pero nos falta dar un paso más, subir un poco más el nivel de competitividad, y estoy convencido de que si logramos recuperar esto, cuanto antes, la próxima temporada vamos a estar en Primera. Por eso digo que es un reto difícil, apasionante y bonito», insistió.
En este sentido, Abel Resino, que ficha por lo que resta de temporada y un año más, recalcó que «no hay tiempo para hacer una revolución ni tampoco creo que sea lo más adecuado. Es una plantilla buena y con calidad, por eso lo más importante es mejorar el nivel de competitividad del grupo».
El ex portero del Atlético de Madrid llega a Vigo acompañado de Pepe Serer, que hará las funciones de segundo entrenador, y Miguel Peiró, quien se encargará de la preparación física del equipo. «He hablado con los cuatro capitanes y les he marcado las pautas que debe seguir esta plantilla de cara al futuro. Hay que quedarse con lo bueno que han hecho en este tiempo y mejorar en lo que han fallado, necesitamos un plus, porque creo que este equipo tiene margen de mejora», señaló.
Abel Resino no ha querido calificar de «final» el próximo encuentro de Liga contra el Granada, porque «no es definitiva», aunque sí admitió que para el futuro de su equipo es «muy importante».
«Esta temporada está siendo un poco atípica. Nosotros tenemos que llegar al último tramo de la Liga, a las últimas seis o siete jornadas, metidos en la pelea, ese es nuestro objetivo», destacó.
Preguntado por el caso Salva Ballesta, a quien había elegido como segundo entrenador pero finalmente dio marcha atrás por el veto presidente del Celta, Carlos Mouriño, Resino respondió que «es una decisión que tomó el club».
«Yo ya he hablado con Salva y está todo aclarado. Es una tema que ha ocurrido y ya está, seguir hablando de esto provocará que no pensemos en el partido del Granada, que es lo importante, y eso a mí no me gusta», subrayó.