Varas es uno de los pocos célticos que tiene experiencia de jugar en la Catedral. En la Liga solo lo hizo una vez, con derrota por 2-0. Su mejor recuerdo es copero: «He tenido victorias importantes como en semifinales de Copa del Rey». El sevillano tacha San Mamés de «campo muy difícil, en donde la gente siempre está en sintonía con su equipo. He vivido todo tipo de ambiente y de resultados».
El portero ve a este Celta preparado para competir en este tipo de escenarios: «Creo que se acabaron las excusas de las novatadas que comentábamos al principio, el equipo ha cogido la onda de Primera en donde los errores se pagan caros y conseguir victorias ante cualquier rival es difícil. Creo que el equipo ha entrado en la dinámica de lo que es la Primera División».
No esconde que la victoria sería un cheque al portador para lo que queda de año: «A nosotros los tres puntos nos darían mucha tranquilidad de aquí a Navidad, porque seguiríamos cumpliendo el objetivo de vernos fuera de la zona de descenso».
Javi Varas se espera a un rival que «busque el toque, aunque tiene el recurso del juego aéreo con Aduriz y Llorente. El Bilbao de hoy en día se caracteriza por tratar bien la pelota, por jugar bien al fútbol y por presionar al rival».