Superó con todo merecimiento a un Sevilla al que maniató
07 oct 2012 . Actualizado a las 02:04 h.Al Celta le da lo mismo jugar ante el cuarto que ante el último. Va a lo suyo. Intenta ser fiel a sus ideas, a su juego, y a su forma de entender el fútbol. En partidos anteriores esa honradez celeste no obtuvo el merecido premio, sin embargo ayer ante el Sevilla se consiguieron tres puntos de oro que confirman que Balaídos es un auténtico fortín.
posesión
El Sevilla discutió el balón
El Celta se encontró ayer con una situación hasta ahora desconocida en Balaídos, y ante la que no perdió los nervios. Durante buena parte del primer tiempo el Sevilla le discutió el balón. Los de Herrera no se desquiciaron y supieron adaptarse a un juego de más contragolpe. Eso sí, en cuanto pudo, el cuadro celeste volvió por sus fueros y comenzó a asumir de nuevo el control del esférico. Así es como se siente cómodo, y lo explota. La recta final del primer tiempo fue un monólogo de posesión local con el Sevilla acomodado en el contragolpe.
asociación
Aspas y su pareja de baile
La capacidad de Iago Aspas para generar peligro es indudable, pero ayer se echó en menos en el primer tiempo alguna pareja de baile con la que asociarse. Las intentonas que el de Moaña hizo con Park acabaron en fracaso, y la vitalidad que en otros partidos le aportaban las bandas tampoco se vio. La entrada de Bermejo en el segundo tiempo revitalizó al de Moaña y también a los interiores.
cambios
Revitalizar y controlar
La entrada de Bermejo por Park resucitó el ataque del Celta, que se enseñó más intenso. Tras el gol de Aspas, y con Balaídos deseoso de que el cronómetro avanzase, Herrera decidió añadir contención al centro del campo con la entrada de Bustos. El equipo perdía el juego de Álex, pero ganaba la intensidad que aporta el refresco. Con Aspas agotado tras un gran partido, el técnico dio entrada a De Lucas, que regaló a la afición el gol de la tranquilidad cuando el Sevilla apretaba.
la defensa
El equipo va a más
Por segunda vez en lo que va de campeonato el Celta consiguió dejar a ceros el casillero de goles encajados; hasta el momento solo lo había logrado ante el Osasuna. El Sevilla no pudo amargar el debut de Sergio, gracias a varias buenas intervenciones del meta, y también a algunas actuaciones destacables de la defensa. La retaguardia va a más, pero necesita seguir adelante en lo que a concentración se refiere, aunque ya ha dado un giro.
madurez
Buen manejo de los tiempos
El peaje de ser novato en Primera el Celta ya lo ha pagado, y ayer el equipo tiró de madurez y tranquilidad tras lograr el primer gol. Supo manejar los tiempos y tuvo contención y calma para salvaguardar el resultado.
análisis tercera victoria celeste