Rubén Albés: «Mi primera opción es seguir en el Lugo»

CDLUGO

ALBERTO LÓPEZ

El técnico vigués dice sentirse «valorado y querido» y confiesa que le han llegado ofertas «del extranjero»

01 jun 2021 . Actualizado a las 22:26 h.

Horas antes de que el presidente confesara públicamente que Rubén Albés (Vigo, 1985) cuenta con la «total confianza» del club y es el elegido para patronear la décima singladura por la Segunda División, el estratega olívico confesaba en una entrevista a este diario que seguir en el banquillo del Ángel Carro es su primera opción de futuro. Él fue el encargado de llevar al equipo a buen puerto en una campaña tormentosa y todo apunta a que también será él la piedra angular del nuevo proyecto. Dos días después del cardíaco partido en Vallecas, Albés aún trataba de ordenar tantas emociones.

-¿Ya es consciente de lo que consiguieron ante el Rayo?

-Poco a poco. Ayer [por el lunes] fue un día para disfrutar, para soltar tensión... Con las pulsaciones más bajas y habiendo liberado estrés se disfruta mucho más.

-Increíble, heroica, milagrosa... ¿Qué adjetivo le pone a la permanencia del Lugo?

-Persistir como equipo. Ese sería el mejor titular para lo que hemos hecho. Había que persistir cuando veníamos de 16 partidos sin ganar, de seis derrotas consecutivas, de no sé cuántos meses sin ganar fuera... El equipo se sentía peor de lo que era, tenía la autoestima muy baja y era muy necesario remediar todo eso. Que los futbolistas volvieran a sentir el nivel que realmente tienen y a partir de ahí, encontrar el modelo de juego que más seguridad nos diera y con el que más pudiéramos potenciar las virtudes de los jugadores.

-¿Le tocó hacer más de psicólogo que de entrenador?

-Un entrenador tiene que tener la capacidad de liderar, lo que significa que debe saber cuidar a sus futbolistas y sacar su máximo rendimiento. Cuando se pasa por una mala dinámica lo primero que suele fallar es la cabeza y por eso hemos intentando mimar mucho a los jugadores y hacerles ver que eran mucho mejores de lo que creían en esos momentos.

-¿Cuál fue su primer mensaje en el vestuario?

-Que venía a ayudar.

-¿Estaban muy abatidos?

-Cuando el vestuario es responsable, como en este caso, y no es capaz de encontrar la recompensa después de tantos partidos, se debilita enormemente por dentro.

-En su debut cayeron ante la Ponferradina. ¿En qué momento creyó de verdad que la permanencia era posible?

-Soy muy optimista. Cuando aceptamos este reto creíamos que se podíamos salvar al equipo, si no no hubiésemos venido. El momento más crítico fue el día del Zaragoza, cuando nos empatan en el descuento con un gol del portero. Fue un golpe al trabajo, pero también nos quedó claro que estábamos germinando y más cerca de volver a ganar.

-¿Cómo vivió el partido en Vallecas?

-Desde la tranquilidad por saber que el equipo estaba preparado para competir. Llegábamos en un crecimiento emocional grande y convencidos de que podíamos ganar. Luego sufrí, claro, pero quizás lo pasé peor ante el Mirandés porque estábamos más verdes en el modelo, no teníamos tanta confianza, hicimos una mala primera parte... El descanso de ese partido fue muy duro para todos porque veíamos que se nos escapaba la salvación.

-¿Se respiraba mucha tensión en los días previos al decisivo duelo con el Rayo Vallecano?

-Para nada. Se respiró el mejor ambiente desde que estoy aquí. Había felicidad fuera del campo; y dentro, mucha responsabilidad y ganas de trabajar. Era el clima ideal para un buen rendimiento.

-¿Sería correcto decir que Albés culminó el trabajo de Nafti?

-Personificar en los entrenadores implica que nos devore el ego. Los futbolistas son los principales responsables de la salvación, eso lo tengo clarísimo. Sin ellos no somos absolutamente nada. Y este vestuario humanamente es brutal y además hay mucha gente detrás que también empuja y tiene su parte de culpa en este éxito, como también la tendría en caso de descenso.

-¿Hay alguna cláusula de renovación en su contrato en caso de permanencia?

-No.

-Se la ha ganado.

-Eso lo tiene que valorar el club. A nosotros se nos contrató para conseguir la permanencia, la conseguimos, y a partir de ahí no hay nada que nos ate. Si el club considera que somos las personas ideales para un nuevo proyecto y crecer de la mano, pues fenomenal. Y si cree debe venir otro cuerpo técnico sería muy respetable.

-Eso parece un guiño al club.

-Sentirme valorado y querido como me siento lo agradezco muchísimo. Eso es lo que busca un entrenador, independientemente del equipo, la categoría o el país donde estés. Por supuesto que me gustaría continuar.

-Lo que ha hecho en el Lugo le abrirá puertas. ¿Le ha llegado ya alguna oferta?

-Sí, tengo un par de propuestas del extranjero. El fútbol español tiene mucha visibilidad. Pero mi primera opción es seguir en el Lugo.

-¿Qué tal se entiende con Tino Saqués, el presidente?

-Bien. Tengo buena relación con él, me ha respetado siempre y me ha valorado. Y ha apostado por mí, así que solo puedo tener buenas palabras hacia él.

-La afición le reprocha tanto cambio de entrenador.

-Cuando uno está en un cargo de responsabilidad tiene que tomar decisiones y seguro que siempre busca lo mejor, en este caso para el Lugo. Lo que está claro es que el club va a cumplir 10 temporadas en Segunda y creo que se valora poco. Solo hay que ver los trasatlánticos que hay y los que han descendido.

-Entre los jugadores que acaban contrato están Pita y Seoane. ¿Recomendaría su continuidad?

-Son dos profesionales nivel triple A y que tienen un sentimiento enorme por el Lugo. Yo los utilicé porque sabía que podían aportar mucho al equipo. Son leyendas del Club Deportivo Lugo.