Un grande para seguir creciendo

M. Pichel LUGO / LA VOZ

CDLUGO

OSCAR CELA

El Lugo acepta el reto del histórico Zaragoza, rival directo en la tabla

08 feb 2014 . Actualizado a las 11:34 h.

El Ángel Carro se vestirá de gala para recibir a uno de los equipos con más pedigrí que ha pisado su césped. Un Zaragoza que redime sus penas en Segunda, aspirante a todo, pero convertido en un rival directo en la clasificación, por arte de los resultados y la diferencia de puntos. El obstáculo de un grande del fútbol español, para tratar de continuar la escalada de los rojiblancos desde el inicio de la segunda vuelta. La cita, a las seis y cuarto de la tarde.

Que el Lugo no se arredra ante los retos de los contrincantes de postín se ha demostrado durante toda la temporada. Sirva como ejemplo el precedente entre ambos conjuntos, en la primera vuelta en La Romareda. En el coliseo de la capital aragonesa, los de Setién sacaron casta y concentración para obtener una victoria por la mínima (0-1, obra de Rennella, gol nacido de un cambio de orientación de Víctor Marco hasta De Coz) que pudo saborearse como una de las mayores gestas del equipo en su creciente historia. Claro que, desde entonces, el Zaragoza ya se ha amoldado a la categoría, y pelea donde se le supone, en la zona alta, con dos puntos de ventaja sobre los lucenses.

Por tanto, todo el mundo se espera un duelo complicado ante un conjunto visitante que no se puede permitir más tropiezos como el de la última jornada contra el Barcelona B si no quiere perder comba con el ascenso directo.

Señas de identidad

El Lugo tratará de mantener sus señas de identidad. Pero, como su rival, sabe adaptarse al medio. Si el Zaragoza, como en el último encuentro en el Ángel Carro hizo el Barça B, se adueña del balón, los rojiblancos tratarán de no pasar apuros amarrando desde atrás. El estado del campo, que los rojiblancos han tratado de cuidar al máximo, evitando en lo posible los entrenamientos en él, será también un indicador de cómo se manejará el juego.

De lo que nadie duda es de la calidad de los zaragozanos, y de su, a priori, superior potencial con respecto a los lucenses. Como decía esta semana Fernando Seoane: «El Zaragoza tiene equipo para estar primero sobrado».

Una diferencia que el Lugo traduce en máximo respeto a su rival, pero que tratará de suplir con la confianza que le han dado los buenos resultados. Tres partidos seguidos sin encajar (a 50 minutos de su récord de imbatibilidad en la Segunda División), siete puntos en el inicio de la segunda vuelta, son una competitiva tarjeta de presentación. Para tenerla en cuenta.