Francisco Manuel López Díaz, propietario del bar Pirata de Fisterra niega que el apuñalamiento de un turista alemán ocurrido en la localidad el pasado día 8 se produjese en su local, tal como publicó La Voz en base a informaciones recabadas entre las fuerzas de seguridad.
López Díaz afirma que los hechos «no se produjeron en el Bar Pirata, ni en sus inmediaciones, ni tuvo participación en tales hechos ninguna de las personas que allí se encontraban, por la sencilla razón de que no ocurrió allí, ni tuvo relación alguna con el establecimiento». La única conexión del suceso con su negocio es que fue él quien se encargó de llamar a los servicios sanitarios para auxiliar al lesionado.
Este caso, al que se refiere el hostelero, sigue sin resolverse porque ningún testigo pudo corroborar la versión ofrecida por el agredido.
La Policía Local y la Guardia Civil instruyeron diligencias e incluso interrogaron a un vecino de Corcubión como presunto autor de las heridas producidas con un arma blanca. Sin embargo, no se pudo demostrar su implicación. El lesionado, después de ser atendido en el hospital Virxe da Xunqueira de Cee, ya se encuentra totalmente restablecido.