El proyecto didáctico «A vila do mañá» se dará a conocer en la Bienal de Venecia y en Viena

El proyecto didáctico de carácter urbanístico A vila do mañá, creado y dirigido por la arquitecta Sandra González, que se estrenó en Rianxo en diciembre del 2016, comienza a recoger sus frutos. Se trata de una innovadora iniciativa en la que ciudades y villas se convierten en tableros de juegos y laboratorios de experimentación para que los jóvenes aporten su mirada sobre los espacios en los que viven. Esta singular propuesta se dará a conocer en el pabellón virtual de la Bienal de Venecia del próximo mes.

También se divulgará en Viena, concretamente en el congreso sobre los niños en la ciudad.

Mención en Ludantia

La dimensión internacional de A vila do mañá es un paso más en un largo recorrido que también ha sido reconocido en Pontevedra. Concretamente, la iniciativa ha recibido una mención especial en la primera Bienal Internacional de Educación en Arquitectura para la Infancia y la Juventud que se desarrolla en una ciudad cuyo modelo urbanístico sirve de ejemplo en diversos continentes.

La arquitecta se mostraba ayer satisfecha por la buena acogida de un proyecto educativo que, como explica, pretende tanto «acercar la arquitectura a los niños como llevar a los arquitectos a los niños. Que interactúen con ellos, que se produzca un intercambio de conocimiento».

Mediante juegos en los espacios urbanos, A vila do mañá busca conocer cómo ven los jóvenes el lugar en el que residen y, al mismo tiempo, cómo lo quieren. Se trata, afirma Sandra González, de «generar un sentimiento de ciudad». La arquitecta asegura que es preciso que los ciudadanos recuperen los espacios comunes: «Los centros urbanos tienen que ser para las personas».

En la comarca, la experiencia se ha desarrollado, además de en Rianxo, en A Pobra y en Ribeira. Precisamente, en la bienal pontevedresa de Ludantia se presentará el libro con el trabajo realizado en la capital barbanzana.

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