El colegio Santa María do Castro de Boiro hace aguas

Laura M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

CARMELA QUEIJEIRO

La ANPA Loureda reclama una solución definitiva para evitar las goteras, que pasan por el arreglo de la fachada y el tejado

24 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Si parecía que la situación de los centros educativos barbanzanos se había normalizado después de un inicio de curso caótico, nada más lejos de la realidad. A colegios como el Santa María do Castro de Boiro se le acumulan los problemas, aunque estos no son nuevos. Y es que el mal estado del tejado y la fachada del edificio han hecho mella en el interior, que tiene problemas de filtraciones desde hace un par de años. Las primeras lluvias de este otoño no han hecho más que agravar la situación y en las instalaciones ya se pueden ver los primeros cubos para recoger el agua de las goteras.

«Levamos moito tempo abandonados. Hai polo menos vinte anos que non se fai un mantemento como debe ser para un edificio desta antigüidade», relata uno de los representantes de la ANPA Loureda, colectivo que reclama desde hace años una solución que no llega. El principal problema viene precisamente del exterior. De la cubierta se han desprendido varias tejas y las innumerables grietas de la fachada hacen que las humedades cubran las paredes de varias dependencias. En uno de los laterales del colegio, además, se ha desprendido parte del revestimiento.

Esto provoca que en los meses de invierno el agua llegue al interior y que el personal del centro tenga que colocar baldes en algunas zonas. «Chóvenos na sala de mestres e na de música, nunha aula que usamos para os desdobres de varias materias e tamén nun aseo», confirma la directora del CEIP Santa María do Castro, Alicia Abad. Y esto no hace más que incrementar el número de desperfectos. «O deterioro das paredes é cada vez maior, cae a pintura, por non falar dos mobles e o material que se perde por estas goteiras», explican desde la ANPA. Tanto el equipo directivo como la asociación de padres han solicitado al Concello de Boiro en reiteradas ocasiones la reparación de estos desperfectos, ya que consideran «que non chova nun centro educativo é algo prioritario», afirma Abad.

 Sin presupuesto

Son ellos los que tienen las competencias, pero en el ejecutivo local afirman que no cuentan con el presupuesto para ejecutar una obra de esta envergadura. «Quédannos moitas cousas que facer e, no caso deste colexio, as deficiencias son importantes», reconoce la concejala de Educación, María Outeiral. Asegura que en su departamento están trabajando codo con codo con la Xefatura Provincial para encontrar una solución definitiva, que pasa por que «nos boten unha man economicamente».

Pero estas no son las únicas deficiencias que ha denunciado la ANPA Loureda. «Comprometéronse a mellorar a seguridade viaria na contorna do centro. Establecemos un mes de prazo, que xa rematou», cuentan.