La espada de Damocles de Velo

Ana Lorenzo Fernández
ana lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

El veterano concejal da un mes de plazo al gobierno local para que le permita entrar en la gestión municipal, de lo contrario dimitirá y propiciará una moción de censura

03 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Dice la Real Academia Española sobre la espada de Damocles que es «amenaza persistente de un peligro». Y en ese sinvivir está el gobierno local de Boiro desde que hace meses se anunció una inminente moción de censura para derrocar al equipo encabezado por José Ramón Romero, Martiño. Y ¿quién empuña el acero? Pues el veterano concejal y exalcalde Manuel Velo Velo, que tiene la sartén por el mango para poder propiciar ese cambio de gobierno en el que podrían entrar en juego su partido, Ciudadanos y el PP.

El portavoz de IC Boiro lleva meses repitiendo los motivos de su desencanto con el regidor, aunque principalmente se resumen en uno: el ejecutivo no ha atendido sus ofrecimientos para poder participar en la gestión municipal. «Le di de plazo tres semanas y ya van veinte, y las cosas no marchan en el gobierno de Boiro. Me llegan cientos de reclamaciones y yo no encuentro a gente en el Ayuntamiento para resolver los problemas de los ciudadanos. Soy un concejal raso, sin ninguna competencia», apunta Manuel Velo.

Reconoce que él lleva años «enganchado a la vida municipal» y su mayor interés es que las cosas funcionen, pero ve que esto no es así. «En el Concello no se despachan asuntos, el alcalde es un director de banda que no delega en nadie, y los alcaldes deben dejarse ayudar. Yo estoy presionando para que entren en razón y que nos dejen participar a los que elegimos ser parte del gobierno de Boiro», insiste, al mismo tiempo que se ofreció a ser «alcalde en la sombra» para aportar su experiencia.

Como ve que el único paso que dio el gobierno de Martiño para tenerlo contento fue convocarlo a unas reuniones, «que total no valían de nada porque no se cumplía lo acordado», Manuel Velo anuncia que «no tardará mucho tiempo en dimitir». Por el momento, da un mes más de plazo para que todos los que respaldaron la proclamación de José Ramón Romero como alcalde se pongan de acuerdo para poder entrar en la gestión municipal. Si finalmente no ocurre, él dejará de ser concejal de la corporación boirense, y «mi compañero hará lo que crea conveniente», apunta sobre una posible moción de censura. Explica que él no vería con malos ojos que pactase con los populares para recuperar el gobierno local: «¿Si el PP nos trae la residencia y cuatro o cinco cosas, por qué vamos a ser sectarios? Yo siendo alcalde le quité mucho a la Xunta», admite.

Rumores de crisis en el PP

Además de Velo, otro de los protagonistas de esta trama es el PP de Boiro, ya que se rumorea que hay varios concejales que podrían estar planeando dimitir de su cargo, mientras que otros orquestan la supuesta moción de censura en connivencia con el concejal de Ciudadanos, Carlos Rodríguez Muñiz.

El exalcalde popular Juan José Dieste reconoció ayer que, hasta donde él sabe, ningún edil de su equipo pretende renunciar y que él tampoco es partidario de ese cambio de gobierno que se plantea, sobre todo en los momentos de crisis sanitaria como los que estamos.

Por el momento, en el pleno extraordinario de hoy presentará su renuncia la edila socialista Marisa Collazo. Siempre cabe la duda de si será la única.