Las depuradoras de Muros y Porto do Son se suman a los estudios para detectar restos de covid en el agua
BARBANZA
La importancia de conocer su evolución y tratar de anticiparse a posibles rebrotes de la pandemia de coronavirus, llevó en su momento a la puesta en marcha de una serie de investigaciones en estaciones depuradoras de aguas residuales de toda Galicia que tienen como objetivo detectar restos de covid-19. La EDAR de Ribeira fue la primera de la comarca en entrar en uno de estos estudios, y recientemente han seguido sus pasos las plantas de Muros y Porto do Son.
Ambas forman parte, junto con otras ocho instalaciones, de la investigación que llevan a cabo, con el apoyo de la Xunta, la Universidade de Vigo y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para la detección precoz de la presencia del virus en aguas residuales, lo que permitirá evaluar la incidencia y la evolución de la pandemia. La novedad de este proyecto con respecto a otros que están en marcha en Galicia es la aplicación de técnicas avanzadas en la toma de muestras «e a secuenciación masiva de nova xeración de augas, para establecer a presenza de virus a través de feces, augas residuais e bioindicadores mariños», informaron fuentes de la consellería.
Organismos vivos
Para la detección del covid-19 y la carga viral se cogerán muestras en el entorno del vertido final de las EDAR, con especial atención a la detección del virus en especies como el mejillón. En este sentido, también se harán muestras en estos animales, ya sea de batea o de roca, que se encuentren próximos a las salidas de las depuradoras.
El proyecto de la Universidade de Vigo y el CSIC se puso en marcha en mayo en las plantas de Cambados, Nigrán y Baiona, y hace unas semanas se amplió a otras instalaciones, entre las que se incluyen las de Muros y Porto do Son, ambas gestionadas por Augas de Galicia. El objetivo es que los resultados de este trabajo den información sobre el estado de la pandemia, permitiendo la detección precoz de rebrotes.