El técnico hizo balance del mal arranque de la temporada y analizó los retos para este año y para el futuro del club
05 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Emilio Palacio, entrenador del Rotogal Boiro, afronta la difícil tarea de explicar porqué no están conformes con ocupar con solvencia la tercera plaza de la Superliga Masculina 2. El también director deportivo de la entidad analizó los próximos retos a alcanzar en el 2019, en el marco de una temporada en la que no muestran del todo su habitual faceta ganadora.
-Hagamos balance, ¿están satisfechos con lo visto este 2018?
-La verdad es que no está saliendo como esperábamos, siempre nos exigimos y queremos un poquito más. Nuestro objetivo era meternos en la Copa [Príncipe], pero los resultados no nos acompañaron. Toca hacer autocrítica porque no estamos jugando del todo bien. Estamos siendo irregulares, es como si tuviésemos tensión todo el tiempo.
-Tienen un equipo a respetar, pero ¿sienten que igual se les está exigiendo demasiado?
-El otro día me preguntaron cómo íbamos este año, y respondí que mal, pero cuando les dije que somos terceros se sorprendieron. Quizás somos muy ambiciosos o nos marcamos objetivos demasiado altos. Todos recordamos aquel playoff en el que estuvimos a un balón de hacerlo, pero aquello fue un regalo y la realidad ahora es otra. Sabemos que está complicado y subir nunca fue la meta. Sin embargo, lucharemos por jugar la fase de ascenso.
-Entonces, ¿la meta será la de conseguir el mejor resultado?
-El club no está capacitado ni económicamente, ni en recursos, para afrontar una categoría superior. También hemos tenido que renunciar a jugar la Copa Galicia porque nos era inviable asistir. Por eso, estoy convencido de que nuestros objetivos pasan por el propio juego. Tenemos que seguir introduciendo cosas nuevas y aprovechar los entrenamientos y los partidos que quedan al máximo para probarnos.
-¿Podemos hablar de un proyecto de futuro en A Cachada?
-Claro, por eso trajimos a jugadores jóvenes. Los últimos tres fichajes tienen 17, 18 y 23 años. Nosotros no somos un club que se pueda permitir fichar a golpe de talonario, por eso exigimos cosas distintas a los jugadores. Nuestro proyecto necesita a Boiro. En una localidad de 20.000 habitantes es evidente que necesitamos tanto a los de fuera como a los locales, esos juveniles que en el futuro tendrán que trabajar para sacar adelante el equipo.
-¿Y Boiro está respondiendo?
-Cada año llegamos a más niños a través de las escuelas deportivas, y ver al equipo sénior es todo un espectáculo y un referente. También estamos trabajando con la Asociación Amicos.
-¿Cómo ruedan los equipos de la base este año?
-En la parte masculina están destacando en todas las categorías, estoy seguro de que será un gran año. En cuanto a las cadetes, nos jugamos mantener la categoría, pero creo que lo lograremos porque están trabajando.
«Está complicado y subir nunca fue la meta. Sin embargo, lucharemos por jugar la fase de ascenso»