Elena Romero se despidió en una fiesta de su trayectoria como profesora de inglés en la academia Eleyra
05 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Llevaba más de 30 años ayudando a los ribeirenses a mejorar su dominio del inglés y, cumplidos los 65 años, Elena Romero decidió emprender una nueva etapa, la de la jubilación. Puso el punto y final a su intensa trayectoria como docente en el marco de una gran fiesta, que contó con la participación de unas 70 personas, entre las que se encontraban alumnos, amigos y familiares.
Elena Romero puso en marcha hace tres décadas una academia en la ciudad que, con el paso de los años y la incorporación de una socia, Ramona Bello, pasó a denominarse Eleyra. A partir de ahora será Begoña Campaña, la que durante los últimos tiempo fue la mano derecha de la fundadora, la que asumirá la dirección y gestión del centro. Ella fue una de las organizadoras de la fiesta en honor de la docente. Contó con la ayuda de la alumna Isabel Betanzos y de dos amigas, María José Carreira y Marieli Dorca. Junto a Campaña impartirán clases Jorge Willisch y Beatriz Gómez.
Recordando la cena, la anfitriona seguía ayer emocionándose: «Fue un encuentro precioso, puesto que entre los asistentes había algunos de los que fueron mis primeros alumnos, como Vicente Mariño. También quiero destacar la presencia de Ramona Bello, que primero fue alumna y después se convirtió en mi socia».
Palabras y versos
Uno de los momentos más emotivos tuvo lugar cuando se leyó un poema que escribió para la ocasión Mercedes Esplá, amiga de la homenajeada que no pudo acudir a la cita. Los presentes también aplaudieron las intervenciones de Begoña Campaña e Isabel Betanzos, así como de la propia Elena Romero, que se deshizo en agradecimientos hacia sus alumnos y los asistentes a la fiesta.
Además de su esposo, Justo Arevalillo, arroparon a la profesora sus hijos, Sergio, Marcos y Daniel; sus nueras y sus nietas, Andrea y Sofía. Elena Romero se llevó de la cita hermosos recuerdos y dos obsequios: un reloj y unos pendientes.