La Escola de Música recorre los colegios de infantil para fichar a nuevos integrantes
06 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Con tan solo 5 años, Mozart era un virtuoso de los instrumentos de teclado y del violín, y ya componía sus propias obras musicales. Conscientes de que para llegar a ser un gran artista hay que empezar desde pequeño, desde la Asociación Cultural de la Escola de Música (ESMU) de A Pobra han puesto en marcha una serie de conciertos por los centros de educación infantil -de 3 a 6 años- para captar a nuevos integrantes, además de «abrir a escola ao concello e darnos a coñecer. Se queremos ter unha escola de futuro, hai que atacar desde a educación máis temperá», argumentó Manuel Sobral, presidente del colectivo.
Así, durante esta semana varios profesores de la Escola de Música pobrense se acercaron a las aulas del colegio Fernández Varela y de las unitarias de O Vilariño, A Granxa e A Angustia provistos de instrumentos que despertaran la curiosidad de los más pequeños, «que moitos só coñecen a guitarra, o piano e pouco máis». Por este motivo, se escogió una tuba, una trompa, un trombón y un bombardino para ofrecer un pequeño concierto, «que deixou aos nenos cos ollos abertos como pratos. A maioría nunca tivera cerca ningún destes instrumentos e non sabían como soaban», reconoció Manuel Sobral.
La experiencia no ha podido tener más éxito, sobre todo «porque tivemos unha disposición total e absoluta por parte do profesorado dos centros, que se volcaron ao 100 % coa iniciativa, empezando polo Fernández Varela e o resto das escolas». De hecho, desde la asociación le pidieron a los docentes que hicieran una evaluación crítica de este proyecto, porque el objetivo es seguir mejorando y trabajando durante todo el curso escolar y volver a ofrecer nuevos recitales con otros instrumentos, «como clarinetes e tamén tocar un pouco de música tradicional», adelantó el presidente de la asociación ESMU.
Docentes implicados
En la actualidad, la Escola de Música de A Pobra cuenta con más de 80 integrantes, y cada curso se suelen sumar unos 20 o 30 niños de entre 3 a 6 años, aunque este año la matrícula todavía ronda los 15. De este colectivo ha surgido «unha banda propia da escola, formada por uns 20 nenos de entre 6 e 11 anos», explicó Sobral, que afirmó que lo ideal es iniciarse en la formación a los 3 años, para luego a los 6 ya poder escoger un instrumento, y a los 8 «ter unha base técnica moi ben encamiñada».
Pero, para lograr todo esto, la pata fundamental que sostiene la escuela es un profesorado que, «ademais de ser bos músicos, están namorados do seu traballo e gústalles ensinar», aplaudió Sobral, que consideró que esa es la clave para tener una oferta educativa de calidad, y seguir atrayendo a jóvenes músicos que pueden llegar muy lejos.