El Gran Premio Fipresci a la mejor película del año llega a las salas

víctor rodríguez

BARBANZA

cedida

Maren Ade se encumbra con su tercer largo tras el éxito cosechado con sus dos anteriores trabajos

20 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

2016 • Alemania, Austria, Rumanía • Maren Ade • Peter Simonischek (Winfried Conradi/Toni Erdmann), Sandra Hüller (Ines Conradi), Michael Wittenborn (Henneberg), Thomas Loibl (Gerald), Trystan Pütter (Tim), Hadewych Minis (Tatiana) • Si existe un premio sinónimo de calidad cinematográfica, ese es el otorgado por la Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica (Fipresci). Establecida en la actualidad en 50 países para la promoción y el desarrollo de la cultura cinematográfica, concedió por primera vez su galardón en la edición inaugural del Festival de Cannes en 1946.

A día de hoy entregado en 75 festivales internacionales de cine, desde 1999 designan a la mejor película del año con el Gran Premio Fipresci, a través de una votación de 475 miembros de todo el mundo. El reconocimiento más representativo de la federación concedido a grandes obras del siglo XXI como El círculo (Jafar Panahi, 2000), Un hombre sin pasado (Aki Kaurismäki, 2002), Lejano (Nuri Bilge Ceylan, 2002), Hierro 3 (Ki-duk Kim, 2004), 4 meses, 3 semanas, 2 días (Cristian Mungiu, 2007), La cinta blanca (Michael Haneke, 2009) y El escritor (Roman Polanski, 2010), ha recaído en su última edición en el estreno seleccionado de la semana.

El argumento

Toni Erdmann

, una comedia poco convencional con un enfoque filosófico, producida, dirigida y escrita por la realizadora alemana Maren Ade, «es una conminación a asumirse plenamente. Estamos ante dos personas que han sabido madurar y aceptarse tal y como son».

Ines trabaja en una importante empresa alemana con sede en Bucarest. Tiene una vida perfectamente ordenada hasta que Winfried, su padre, llega de improviso y le hace una pregunta inesperada: «¿Eres feliz?». Incapaz de contestarle, su existencia se ve conmocionada por la presencia de ese padre del que se avergüenza un poco, pero que le va a ayudar a dar nuevamente sentido a su vida gracias a un personaje imaginario: el divertido Toni Erdmann. Como apunta Ade, «el humor, en muchas ocasiones, es la mejor herramienta para trascender la realidad».

Conocida por su rol de productora de películas como

Tabú

(2012) o los tres volúmenes de

Las mil y una noches

(2015) de Miguel Gomes, empieza a trascender como directora tras ser premiado su primer largometraje

Los árboles no dejan ver el bosque

(2003) en Sundance, el segundo

Entre nosotros

(2009) en Berlín, y el tercero que nos ocupa, además de recibir el Gran Premio Fipresci, conseguir en los Premios del Cine Europeo el pleno: película, directora, guion, actriz (Sandra Hüller) y actor (Peter Simonischek).