Vivenda se compromete a agilizar los trámites para iniciar las obras del polígono sonense

BARBANZA

03 dic 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El tortuoso camino del polígono industrial de Porto do Son parece haberse clarificado bastante tras la reunión mantenida ayer por una delegación sonense con responsables de Vivenda, quienes se comprometieron a agilizar los trámites para iniciar cuanto antes las obras del parque empresarial.

Al encuentro celebrado en Santiago asistieron el presidente y el vicepresidente de la patronal, Luis Oujo y Melchor Maneiro, respectivamente, acompañados por el alcalde, Manuel Tomé, cuyo objetivo principal era tener una idea aproximada de los plazos que se manejan para tener operativo el polígono, que formará parte del plan sectorial del área funcional Muros-Noia.

Tanto el director xeral de Vivenda, Daniel Pino, como el delegado de esta consellería, Xoán Carlos Bascuas, aseguraron que la redacción del plan sectorial y del proyecto del parque industrial correrán parejas, lo que redundará en beneficio del empresariado sonense.

Previsión

Al término de la reunión, el alcalde, Manuel Tomé, explicó que la Consellería de Vivenda calcula que la tramitación estará lista en el plazo de unos ocho meses, lo que significa que a finales del 2009 pueden darse las condiciones necesarias para que las máquinas comiencen a explanar y a urbanizar el terreno en el que deberán instalarse las naves industriales.

Después de todas las vicisitudes por las que ha atravesado el polígono sonense, el hecho de que Pino y Bascuas indicasen ayer que existe un compromiso personal de la conselleira Teresa Táboas para que la actuación se lleve a cabo, supuso una inyección de aliento para la delegación sonense.

Satisfacción

Los tres asistentes al encuentro expresaron su satisfacción por que, según coincidieron en afirmar, encontraron en Pino y Bascuas muy buena disposición para hacer realidad el ansiado parque empresarial de Porto do Son.

Satisfecho por el resultado de la entrevista, el regidor, Manuel Tomé, criticó el hecho de que ninguno de los otros representantes políticos que en anteriores ocasiones acudieron a las reuniones con Vivenda, como la nacionalista Ánxela Franco y el socialista Ramón Quintáns, lo hubiera hecho en esta ocasión. Tomé afirmó desconocer la causa de la ausencia.