
En el municipio vikingo, el nivel de votación ha crecido en más de doce puntos. En cambio, en Vilagarcía y en Pontecesures solo la mitad de los electores habían acudido a las urnas a las seis de la tarde
28 may 2023 . Actualizado a las 19:30 h.Uno de los mantras que cualquier jornada electoral trae bajo el brazo es la lucha contra la participación. Una arenga frecuente entre todos los candidatos. Por lo que respecta a este 28M, el mensaje parece haber calado entre los votantes arousanos. Especialmente en plazas que se avecinan muy reñidas, como Catoira, donde a las seis de la tarde el 72,69 % de los vecinos con derecho a sufragio ya lo habían ejercido. Su nivel se dispara por encima de los doce puntos con respecto a lo que sucedió hace cuatro años.
Aunque en menor medida, este fenómeno al alza es también muy acusado en A Illa, donde la pugna electoral se avecina muy cerrada (un 68,97 % de los isleños habían votado a las 18 horas, un 5,66 % más que en el 2019), en Meaño (66,16 %, con un incremento de 5,82 puntos) y en Valga, que alcanza el 62,44 %, lo que supone un refuerzo de la participación de un 5,19 %.
En un tercer escalafón se colocan Meis (62,75 % y un crecimiento del 4,41%) y otro municipio en el que la campaña electoral ha sido particularmente dura: Vilanova, donde el 58,93 % de los votantes han pasado por las urnas frente al 54,80 del 2019.
Cambados y O Grove muestran ligeros incrementos, con un 58,55 y un 51,19 %, respectivamente. No parece la cosa muy animada en Pontecesures, donde solo la mitad del electorado se había movilizado a las seis de la tarde. En Ribadumia el porcentaje es elevado, un 64,01 %, prácticamente calcado al del 2019.
El nivel de participación más bajo se sitúa en Vilagarcía, donde a las 18 horas solo habían votado el 48,31 % de los electores. Aun así, el porcentaje supera en dos puntos al de los comicios del 2019.