El Arousa dice adiós a la Segunda RFEF

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Los de Luisito firmaron un gran partido y tuvieron un penalti en el 87 detenido por Santi Canedo a Nuño, pero no lograron ganar al Bergantiños (1-1)

15 may 2022 . Actualizado a las 21:40 h.

Fueron 3.800 los aficionados que, en cálculos del club local, poblaron las gradas de A Lomba este domingo al mediodía por abrumadora mayoría con los colores del Arousa. El jugador número 12 no le falló al conjunto dirigido por Luisito. Pero ni un campo cercano al lleno hasta la bandera ni una de las mejores versiones del presente Arousa bastaron para conseguir siquiera esa victoria sobre el Bergantiños inexcusable a fin de evitar un descenso a la Tercera RFEF al que habría sido igualmente abocado aún haciendo su parte de la ecuación, tras el gol en el tiempo añadido con el que el Marino de Luanco subía el definitivo 1-2 en el campo del Navalcarnero. Al término del choque, estampa funeraria entre los jugadores, el cuerpo técnico, la directiva y la afición local, pero también entre un Bergantiños en el que más de uno reconoció sentirse más dolido por haber participado del descenso de un equipo con amigos y viejos camaradas que por ver esfumarse un billete para la fase de ascenso para el que tampoco dependían solo de sí mismos. El Arousa deja la Segunda RFEF, además, como penúltimo clasificado, cayendo tres puestos en la jornada final.

Conscientes de que sus objetivos correspondientes pasaban inexorablemente por una victoria, los entrenadores de Arousa y Bergantiños ordenaron a sus hombres apostarse de inicio sobre la línea de salida del balón de su rival. La consecuencia, posesiones cortas y el manejo vertical del esférico. Pero aunque los contados acercamientos escritos con tinta roja se repartieron casi por igual, el Bergantiños probó una mayor dosis de profundidad en la fase inicial del encuentro. La que reflejaron sus cuatro córneres en los primeros 16 minutos de juego. El último de ellos, el pie que dio paso al 0-1.

Un centro de Remeseiro en banda derecha había llevado en el minuto 7 la inquietud a los dominios de Álex Cobo, pero a Carlos le faltó un palmo para enganchar el cuero libre de marca en el corazón del área. El Arousa respondió casi de inmediato, con Santi Canedo evitando el 1-0 mandando a córner el disparo cruzado de Porrúa, que finalizó con furia una contra conducida por Luismi, su asistente con un pase entre líneas. Dos minutos después, en el 12, Luismi se topó con la pierna de su par en su tiro en carrera en el primer metro del área, en un balón a la espalda de la zaga visitante. Fue la antesala del gol.

En el cuarto córner del Bergantiños en un cuarto de hora, Yelco conectó el esférico con la testa de Chapu Brunet, que sobre la línea del área chica colocó la pelota justo por debajo del centro del larguero con una potencia y precisión inabarcables para Álex Cobo: 0-1.

El tanto exigió al Arousa unos minutos de duelo, en los que Escobar disparó cruzado y desviado en el inicio del rectángulo grande. Pero tras la pausa de hidratación, a la media hora del partido, los de Luisito volvieron plenamente enchufados al duelo. Haciéndose progresivamente con la posesión y consolidando el juego en campo contrario. Con varios centros envenenados si bien, no obstante, con un único par de ocasiones claras antes del descanso. En un brillante pase entre líneas de Julio Rey en tres cuartos de medular que junto a la carrera de Porrúa dejó al ayer interior derecho arlequinado solo ante Santi Canedo. El portero del Bergantiños se ganó el sueldo con una gran parada, enviando el cañonazo a bocajarro de Porrúa a córner en el minuto 32. En la última acción antes del pitido a vestuarios, Cotilla obligó al cancerbero carballés a estirarse para blocar un disparo al interior del palo izquierdo de Santi Canedo en una falta a cinco metros del área, algo escorada hacia la derecha. Poco antes, un centro-chut de Escobar que se fue por poco y acabó en córner había completado la decreciente lista de méritos ofensivos del conjunto de Lemos.

No debió de verlo nada claro Luisito cuando decidió volver del descanso con Alberto Martín y Pedro Beda pasando por la ducha sustituidos por Pedro García y Mon. El primero, pasando a formar línea de tres centrales con Campillo y Piay y Fontán y Cotilla como laterales profundos. Mon, haciendo doble pivote con Diz, con Porrúa y Julio Rey dibujando en los costados una punta de lanza afilada en las botas de Luismi.

Un remate a media vuelta de este en el 48 en la prolongación del primer córner de la segunda mitad se marchaba demasiado alto. Y en el 57, una triangulación entre Mon, Luismi y Julio Rey no logró culminarla el primero por muy poco a centro por línea de fondo de su capitán. Un pase en largo de Julio Rey que Santi Canedo le quitó de los pies a Luismi y un remate lateral de Porrúa en el área pequeña que el portero del Bergantiños envió a córner en el 64 dejaban claro que el Arousa iba a por la remontada. Pero los minutos pasaban y el cambio de piezas y, sobre todo, de sistema implementado por el técnico arlequinado no solo no ayudaron a su equipo a generar más fútbol y ocasiones, también hicieron perder la elasticidad y verticalidad con las que el Arousa se había acercado a los dominios de Santi Canedo en sus mejores minutos de la primera parte. Y Luisito tiró de su último cartucho de gran calibre. Dando entrada en el 64 a Nuño por Campillo.

El Arousa empezó entonces a morder de verdad. Con el propio Nuño levantando a la grada de A Lomba con un zambombazo frontal que se marchó ligeramente alto por encima del travesaño en el 68. En el 70, Cotilla asistió desde tres cuartos a Luismi, que al primer toque y de tacón obligó a la estirada de un Santi Canedo que no logró atrapar en primer término, pero sí de segundas, con la suerte de su lado en el rechace del esférico a la base de su poste derecho. Y tres minutos más tarde, llegó el fruto de la revolución arlequinada. En la continuación de un saque de esquina, Mon colgó el cuero al segundo palo, donde Pedro García, libre de marca, batió de tiro cruzado al hasta entonces inexpugnable Santi Canedo.

Para entonces, Lemos ya había hecho sus tres cambios. Dando entrada a Cano por Boedo, primero, e introduciendo poco más tarde, en el 72, a Concheiro y Lamelas por Yelco y Carlos. De nada le sirvió al técnico del Bergantiños para frenar a un Arousa llevado ya por el aire por casi cuatro mil entregadas gargantas.

Mas Santi Canedo acabó encumbrado como el hombre del partido, aunque de nada le acabase sirviendo ni a los suyos ni a sus rivales. Salvando un disparo franco de Luismi, habilitado por otro gran pase de Julio Rey en el 81. Y deteniendo la pobre ejecución del penalti lanzado por Nuño en el 87, tras trabarle a él mismo Chapu Brunet una pierna en un balón en el área. El asturiano lanzó a la izquierda del portero, pero demasiado centrado y con poca fuerza. Fue el canto del cisne de un Arousa que, como se había comprometido esta semana su capitán, no dejó de intentarlo hasta el minuto 93 dictado por el árbitro.

FICHA DEL PARTIDO:

AROUSA (1): Álex Cobo, Javi Fontán, Piay, Campillo (Nuño, min 64), Cotilla, Julio Rey, Alberto Martín (Pedro García, min 46), Diego Diz (Jorge Fajardo, min 83), Porrúa (Róber, min 83), Luismi y Pedro Beda (Mon, min 46).

BERGANTIÑOS (1): Santi Canedo, Blas, Parga, Chapu Brunet, Brais Martínez, Remeseiro, Uzal, Boedo (Cano, min 66), Carlos (Martín Lamelas, min 72), Yelco (Antón Concheiro, min 72) y Escobar. 

GOLES: 0-1, min 16: Chapu Brunet. 1-1, min 73: Pedro García.

ÁRBITRO: Roberto Carralero Calvo (Colegio de Madrid). Amonestó al jugador local Alberto Martín y al visitante Parga.