Lita Cabellut quedó gratamente sorprendida con la experiencia vivida en la comarca en los dos últimos días
27 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Lita Cabellut cerró ayer por la tarde en A Illa un periplo de dos días por la comarca en lo que ha resultado una experiencia que nunca se hubiera imaginado. «Ha sido mucho más de lo que esperaba. He visto el entusiasmo de la gente, el pueblo ha tomado la ciudad y el arte ha salido a la calle. Esto ha sobrepasado a los políticos, los políticos han quedado de adorno». La artista aludía con estas palabras a la cuarta edición de Arts Street Colectivo, que ayer y anteayer se celebró en Vilagarcía, Cambados, Vilanova y A Illa con motivo de la conmemoración de la Semana de la educación artística que convoca la Unesco.
Cientos de niños y adultos colaboraron en el proyecto diseñado por Cristina Sierra-Villegas y elaboraron un montón de flores hechas con material reciclado y en gran formato, que sirvieron de punto de partida para realizar, después, una performance en la calle (ayer en Cambados hubo que hacerla en el salón Peña por culpa de la lluvia).
Mucha complicidad
Lita Cabellut está encantada de haber podido compartir esta experiencia con ellos. «El arte ha unido a la gente; los gitanos, las madres, sus hijos... el arte infecta, se pega en la piel, el arte no son las galerías, es sentimiento». Y sentimiento es lo que ha percibido en los arousanos que la han arropado en su visita a la comarca. El efusivo abrazo en el que se fundió con la pequeña Laura ayer en Cambados es un fiel reflejo de lo vivido estos dos días. Esta artista, acostumbrada a exponer en las principales salas del mundo, no ha tenido reparo en coger una pistola de plástico y ponerse a la par de los niños para lanzar disparos de color en esta particular batalla de flores que se ha montado en la vía pública. «¡Pero has visto que bien hechas están las flores!», comentaba ayer. Algunas se las llevará para componer una de las obras que incluirá en la exposición que va a inaugurar en octubre en el Museo de Arte Contemporáneo de A Coruña, «porque quiero que ellos se sientan también partícipes del arte».
Es la primera vez que Lita Cabellut participa en un proyecto artístico de esta naturaleza, y confía en que no sea la última, aunque su trabajo no le permita hacerlo con la frecuencia que desearía, según explica.
De Galicia se va con muchas imágenes en la retina; de arte, de luz y de esos montes preñados de eucaliptos que tanto le gustan. Quizá esta esquina del mapa sea, además de un buen recuerdo, una fuente de inspiración para la pintora española más cotizada del momento.