Alerta máxima entre los centros escolares de Vilagarcía ante las llamadas de un hombre que pretendía sacar de clase a dos alumnas menores
AROUSA
El individuo, que telefoneó a dos institutos, se hizo pasar por el padre de las chicas, arguyendo que debían ir al hospital
24 sep 2023 . Actualizado a las 14:34 h.Es posible que se trate de una broma entre adolescentes. Pero la más ínfima probabilidad de que detrás se oculte un sórdido propósito bastó para que la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Vilagarcía activase un estricto protocolo de seguridad. Un hombre telefoneó esta semana a dos centros educativos de la capital arousana. El contenido de las conversaciones que mantuvo con quienes atendieron sus llamadas no podía ser más prosaico. Un padre se ponía en contacto con el colegio o el instituto de su hija, en ambos casos menor de edad, para que esta abandonase las clases a fin de acudir a una cita en el hospital. Es fácil imaginar el escalofrío que atenazó a los miembros de las dos comunidades escolares, empezando por las familias de las chicas, en cuanto descubrieron que aquel interlocutor, en realidad, nada tenía que ver con ellas.
La reacción del equipo que dirige el inspector jefe Luis Hombreiro cuando conoció la primera llamada fue inmediata, y se multiplicó al comprobar que existía un segundo telefonazo. La Policía Nacional ha contactado con los responsables de los cuatro institutos y los nueve colegios que funcionan en Vilagarcía para que extremen sus protocolos a la hora de que los alumnos menores de edad abandonen las instalaciones escolares antes del horario previsto para su salida. En ningún caso deben permitirlo si quien se encarga de ir a buscarlos no es alguno de los padres o tutores de los estudiantes, o alguien que porte una autorización por escrito firmada por ellos. De forma paralela, agentes uniformados y de paisano han sido movilizados para que vigilen el entorno de los centros educativos.
Las dos llamadas telefónicas seguían el mismo patrón. Una voz de hombre adulto preguntó por cada una de las alumnas, a quienes se refirió utilizando sus nombres y apellidos. Algo que puede indicar que su autor conoce a las adolescentes. O, simplemente, que ha podido acceder a sus redes sociales. La Policía Nacional peina ahora sus perfiles, rastreando cualquier indicio que conduzca a los agentes hasta el autor de ambos intentos de suplantación, bajo la hipótesis de que se trate de un mismo individuo. Mientras no se aclare qué ha ocurrido, la Comisaría mantendrá su operativo y la recomendación de que los colegios mantengan un riguroso control sobre las salidas fuera de horario.