«Despois dos días que levamos así, por aquí aínda non vimos a ningún home con funda»

La Voz

AROUSA

MARTINA MISER

27 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Llevamos dos semanas así y por aquí no aparece nadie, ni un hombre con funda». Las palabras de Tomás, que es quien habla, encuentran el respaldo de la decena de vecinos que ayer por la tarde se reunieron en Trabanca Sardiñeira para denunciar el kafkiano asunto en el que se han visto envueltos. A principios de mes, el teléfono fijo de sus casas dejó de funcionar. E Internet, también. «Hai moita xente que está coma nós», dice el grupo, al que al filo de las cinco y media de la tarde se sigue sumando gente enfadada. Porque no es solo que estén sin servicio: es que nadie les dice, aseguran, cuándo lo van a recuperar. A unos, en la empresa suministradora les han dicho que la cosa va para largo. A otros, que el problema es una pieza que tiene que llegar de Alemania. Incluso hay a quien ayer mismo le dijeron que la falta de servicio estaba originada por la última tormenta. «Pero, imos ver, ¿como ía ser a tormenta da noite se levamos máis de quince días así?». Por no hablar de que las llamadas, realizadas desde sus móviles, se eternizan, «entre musiquitas y maquinitas», se lamentan los afectados. Estos hacen hincapié en que muchos de los que padecen esta situación son personas mayores que se las ven y se las desean para utilizar el móvil. De hecho, hay quien no tiene móvil. Es el caso de María del Carmen, que tiene que peregrinar a casa de su hermana para poder hablar por teléfono con su hija, que vive fuera de Galicia. «Y es ella desde allá la que está llamando para quejarse por esto», explica la mujer. A su lado, Teresa asiente. Ella tiene a sus hijas en casa. «Necesitan Internet para trabajar», dice. Y llevan dos semanas sin él. «Hoy en día hay muchísima gente que lo necesita por cuestiones laborales», sentencian los afectados. Y todos apuntan a los vecinos que están pendientes de una cita en el Hospital do Salnés. «La mayoría dieron el teléfono fijo, y ahora si los están llamando no se enteran. ¿Y si pierden la cita?». El enfado, en Trabanca, es evidente, y crece con cada llamada sin respuesta. Algunos han probado a quejarse vía Coruña. Otros han recurrido hasta a Madrid. Pero siguen sin servicio. Y, cada día, un poco más hartos.

«Hay gente esperando que los llamen del hospital. ¿Y si pierden la cita con el médico?»