Presidente y entrenador: tándem familiar en Ribadumia
13 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Mucho ha cambiado el piragüismo desde que José Manuel Vázquez (padre) ganaba con su compañero Cesáreo Oubiña el descenso del Lérez, allá por los años 60. Se batían con los piragüistas de la capital con embarcaciones que pesaban quince kilogramos y con palas hechas a base de ramas de eucalipto, que «so tiñan poliéster na punta», recuerda. José Manuel, con varios compañeros de Ribadumia, había fundado el O Muíño unos años antes. Era directivo y palista, como los demás, y no le daba nada mal. Lo suficientemente bien como para ir un par de veces al Campeonato de España.
La trayectoria de ese O Muíño original se prolongó hasta el año 80. Ahí, desavenencias entre los directivos originales y los que en ese momento llevaban las riendas del club derivaron en el cierre de la entidad. La sequía piragüística se prolongó hasta 1993. Rafael Louzán, que también le da a lo de la piragua, convenció a José Manuel Vázquez y a sus antiguos colaboradores para que se lanzaran de nuevo a la aventura de fundar un club. Y surgió el Náutico O Muíño. Y empezó a gestarse el relevo.
José Manuel Vázquez (hijo) fue uno de los primeros palistas que tuvo el nuevo Náutico O Muíño. Comenzó tarde, ya en categoría cadete, pero le dio tiempo a ganar alguna medalla para un club que comenzaba a hacerse un hueco en el panorama piragüístico estatal. José Manuel pronto decidió que la faceta que más le gustaba era la de entrenador. Comenzó con los más pequeños y se fue forjando un nombre que incluso le llevó a formar parte del equipo nacional la pasada temporada. De su mano, el club de Ribadumia puede presumir de ser el único España que participa en todas las disciplinas piragüísticas (pista, slalom, kayak polo, kayak de mar, en la presente temporada comenzarán con el kayak surf...) y tuvo el honor de albergar en la campaña 2008 a los campeones del mundo Perucho y Craviotto.
El responsable técnico del Náutico O Muíño considera que en la campaña 2011 el club rondará el centenar de licencias, pese a las dificultades para en estos momentos los niños se metan en el mundo de las piraguas. Y pena que no lo hagan, porque no podrán disfrutar de pruebas como el Descenso do Umia, «a que ten máis afluencia de público no seu percorrido», presume José Manuel.
Nombres
José Manuel Vázquez, de 68 años, lleva medio siglo entre piraguas. Fue uno de los pioneros en practicar este deporte en Ribadumia. Su hijo José Manuel, de 30 años, es el actual máximo responsable técnico del Náutico O Muíño, un club que ha conseguido ganarse el respeto en el mundillo piragüístico estatal