Internautas usan la Red para vengarse de sus parejas durante la separación
AROUSA
Crece el número de personas que cuelgan imágenes íntimas de sus ex compañeras El ministerio público constata un ligero descenso de las estafas bancarias por Internet
29 nov 2006 . Actualizado a las 06:00 h.En el transcurso de las jornadas sobre criminalidad organizada internacional que se desarrolló en Alicante y en el que participaron cuarenta fiscales de toda España, Marsella y Nápoles, el fiscal de delitos telemáticos de Pontevedra abordó nuevas modalidades delictivas en el marco de Internet, según recogían ayer varias agencias de prensa. El representante del ministerio público pontevedrés alertó, en este sentido, de que se está constatando un incremento de casos de personas que, en el transcurso del proceso de separación, no tienen reparos en colgar imágenes íntimas de sus ex parejas en la Red. Expresó que tales acciones se circunscriben al ámbito de los delitos contra la intimidad, al tiempo que, siempre según lo expresado por las agencias, expresó que los motivos que se encuentran detrás de estas acciones son deseos de venganza o sentimientos de despecho por la relación ya finalizada. Luis María Uriarte aprovechó su presencia en el foro alicantino para resaltar el hecho de que el phising, las estafas bancarias a través de Internet, había pasado de ser algo frecuente a ir decayendo en los últimos tiempos. El fiscal de delitos telemáticos de Pontevedra consideró, en relación con esta cuestión, que «hoy en día ya no se puede engañar a la sociedad con el phising, ya que tiene información», si bien reconoció que este tipo de sucesos «son muy complicados de investigar». No obstante, el fiscal pontevedrés expuso que, en cualquier caso, las estafas son junto con la pornografía infantil el delito telemático más común y defendió la especialización dentro del ministerio público como método para luchar contra las organizaciones criminales que se valen de Internet para llevar a cabo sus operaciones delictivas. Violencia escolar Otra de las cuestiones sobre las que profundizó Luis María Uriarte es el binomio que pueden llegar a conformar la Red y la violencia en los centros educativos. En este punto, tras matizar que hay que investigar cada caso concreto, mantuvo que en términos generales «no se puede considerar acoso escolar los vídeos que se cuelgan en Internet para amedrentar a compañeros de clase», mientras que aquellos supuestos en los que «se amenaza con mostrar fotografías» se califican, también, como delitos contra la intimidad.