El Obradoiro y Moncho Fernández no terminan de darse el sí ni el no

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

ANDAR MIUDIÑO

XOAN A. SOLER

Las dos partes han puesto sus argumentos sobre el tapete y falta el último paso

19 jun 2023 . Actualizado a las 21:17 h.

Solo dos clubes de la ACB están todavía pendientes de resolver quién se sentará en sus respectivos banquillos la próxima temporada, y hay un tercero, el Baskonia, en el que se multiplican los rumores acerca del cambio..

El primero en moverse fue el Girona, que a principios de junio anunció que el veterano Aíto García Reneses no seguirá en el equipo la campaña venidera. El nombre que está sonando con más fuerza como relevo es el de Salva Camps.

Joan Peñarroya firmó el pasado verano un contrato por dos temporadas con el Baskonia. El equipo realizó un gran baloncesto, pero tocó techo en diciembre y a partir de ahí fue perdiendo fuelle. En la última jornada se quedó sin plaza para las eliminatorias de la Euroliga. Cayó en cuarto de final en la Copa del Rey y en la Liga Endesa.

En Vitoria ha sonado incluso el nombre del griego Ioannis Sfairopoulos como sustituto, pero el club no se ha pronunciado. Este fin de semana el Alavés confirmó el retorno a Primera División y ese salto redundará también en beneficio del nuevo proyecto económico, con o sin Peñarroya.

Y con o sin Moncho Fernández sigue siendo la gran incógnita en Sar. Es la primera vez en los últimos trece años que el club llega a estas alturas del mes de junio sin saber si seguirá en el banquillo el Alquimista de Pontepedriña, que acaba contrato.

Tras la presentación del nuevo director deportivo, Eduardo Pascual, comenzaron las negociaciones. El técnico ya conoce las líneas maestras del proyecto que debe modelar Pascual y el club también está al tanto de cuáles son los criterios que defiende el entrenador. Hay algunas diferencias, está por ver si soslayables. Ni el Obradoiro le ha dicho no a Moncho Fernández ni viceversa, si bien no terminan de darse el sí. Y toca salir del bucle.

Las prórrogas y el tanteo

No es una cuestión urgente, pero el tiempo empieza ya a jugar en contra. Dos jugadores, Álvaro Muñoz y David Walker, tienen una opción de prórroga en su contratos sobre la cual debe pronunciarse el Monbus Obradoiro antes del día 30.

Otro frente que está ya sobre el tapete es la de los jugadores que el club incluirá en el derecho de tanteo. Una vez que acabe la temporada, se abre un plazo de tres días naturales para que cada club comunique quienes son los elegidos. Si el Barça gana este martes al Madrid, se pondrá en marcha el contador. Si no habrá que esperar al cuarto partido (el jueves) o, a más tardar, al quinto (el domingo).

No es un tema menor en la planificación. Obliga a presentar una oferta de renovación a los jugadores que pasan a someterse al tanteo, como mínimo igual a la de la campaña que está concluyendo.

Una vez que se hace oficial la lista, se abre un plazo de trece días para que clubes de la ACB interesados en contratar a alguno de los nombres propios de esa relación presenten una oferta. De ser el caso, de inmediato se le da traslado al club que tiene los derechos para que decida si la iguala o no. Dispone de cinco días para pronunciarse.

Puede suceder que acabe el plazo de los trece días sin que un jugador reciba ofertas de otras entidades. En ese caso deberá decidir si firma la renovación o bien opta por buscar destino en otras ligas. En definitiva, el proceso puede extenderse hasta mediados de julio o más tarde.

Para ver cómo afecta a la planificación, basta con establecer una hipótesis. Dos de los jugadores más cotizados del Obradoiro son Robertson y Thomas Scrubb. Si el club los incluye en el tanteo, asume la espera y que, durante ese tiempo, si entra en el radar algún jugador interesante para esos puestos, tendrá que decir no y esperar.