Dos aficiones ejemplares en Sar

Manuel García Reigosa
M. G. Reigosa EL PERISCOPIO

ANDAR MIUDIÑO

PACO RODRÍGUEZ

09 feb 2023 . Actualizado a las 14:32 h.

El partido del sábado en Sar dejó una de las vivencias que reconfortan y reivindican la imagen amable que siempre debe acompañar al deporte, con dos aficiones ejemplares en el trato.

En uno de los laterales de la tribuna dos presenciaron el encuentro varias docenas de seguidores del conjunto vizcaíno, que se hicieron notar durante el calentamiento y, por momentos, también durante el partido.

Antes de que comenzase el choque, el speaker de Sar pidió para ellos un aplauso, y eso que lo que sonó en el resto del pabellón. Cuando llegó el turno del Miudiño, los aficionados del Bilbao fueron sumamente respetuosos desde el rincón elevado en el que se encontraban. Y a la conclusión del encuentro, las dos hinchadas cruzaron aplausos y reconocimiento.

Pepo Suevos, actor y seguidor del Obradoiro, compartía en sus redes sociales una foto con un hincha del equipo vasco, después de que ambos intercambiasen sus bufandas.

En tiempos en los que en el fútbol hay clubes que se curan en salud y recuerdan a las aficiones rivales que no entren al campo con señas que los identifiquen con su equipo, reconforta ver que la convivencia es posible, y que unos y otros pueden disfrutar del más allá del resultado.

También son muchos los obradoiristas que no olvidan el último partido del equipo en Sar en su primera temporada en la ACB, con el descenso ya consumado. El rival era el Estudiantes. Y un grupo de integrantes de su afición, la célebre Demencia, desplegó una pancarta con la siguiente leyenda: «Con un andar miudiño volveredes á ACB».

Si el deporte deja de ser amable, pierde su esencia. Por eso conviene destacar también los episodios que muestran la armonía, porque los hay, aunque pasen más inadvertidos o, en el mejor de los casos, sin hacer ruido.