Birutis, pívot de claqué y chaqué

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

ANDAR MIUDIÑO

PACO RODRÍGUEZ

Firmó en el confinamiento y se afianza como uno de los pilares del Obradoiro

03 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Van solo nueve partidos, pero Laurynas Birutis ya no es un desconocido en la Liga Endesa. En su primera contienda se erigió en el jugador más valorado, con 42 créditos, ante el Fuenlabrada. En Málaga se fue hasta los 37 y, a falta de un encuentro para completar la jornada, es muy probable que repita galardón. Solo ha tenido un día flojo, en Bilbao, que coincide también con el expediente más gris del equipo.

En cierto modo es el pívot del confinamiento, porque dio el sí a la oferta del Monbus Obradoiro a finales de abril, con todas las competiciones paradas y en la antesala de un futuro muy incierto. En ese momento el club todavía no sabía con qué presupuesto iba a contar, pero el consejo de administración no frenó la operación. Y entre Bendzius y Beliauskas, con quien había coincidido en las categorías inferiores de la selección, le ayudaron a tomar la decisión.

Tardó en hacerse oficial, hasta bien avanzado el mes de julio, ya que todavía quedaba un escollo. El Zalgiris tenía una opción para prorrogar el contrato. Si la ejecutaba, se caía la operación.

No fue el caso y ahora es una de las sensaciones de la Liga Endesa. «Hasta que lo vi lanzar tiros libres no sabía si era diestro o zurdo», comentaba hace unas semanas Albert Oliver. Lo cierto es que, cerca del aro, maneja indistintamente bien las dos manos. Y baila en el poste bajo como si llevase zapatos de claqué en vez de zapatillas. Y tiene un radar que le permite mover el balón en la dirección adecuada. Juega con la elegancia del chaqué cerca del aro.

Víctor Pérez es el ayudante de Moncho Fernández que más tiempo pasa trabajando con los pívots. Alberto Blanco, que formó parte del cuadro técnico del Lietuvos Rytas, tiene referencia de Birutis de la etapa que estuvo en Lituania. Tonecho Lorenzo verá como el número catorce de la camiseta con la que jugaba en el Obradoiro lucirá en el techo de Sar en cuanto la pandemia permita la vuelta de público a las canchas. Y José Ángel Rivera Mozan y Miguel Gómez son dos referentes de los banquillos compostelanos. Cada uno da una pincelada de la impresión que está causando Laurynas Birutis en este arranque de curso.

víctor pérez

«Me sorprende un impacto tan inmediato». Admite que un rendimiento tan temprano no estaba en la hoja de ruta: «Me sorprende un impacto tan inmediato. Lo conocíamos por sus habilidades en el poste bajo y en el pick and roll. Le ayuda mucho su conocimiento del juego, comete muy pocos errores, está muy concentrado y sabe jugar. Lo estamos encontrando mucho en esas situaciones de poste bajo y pick and roll y se está aprovechando de asistencias de sus compañeros. Está reboteando muy bien ofensivamente, sacando faltas y metiendo tiros libres. De ahí sus valoraciones».

A las aptitudes le suma una gran actitud: «Es un jugador al que le gusta trabajar, tiene pasión por el baloncesto, disfruta del día a día, entrenando y compitiendo. Eso se nota en el rendimiento».

Víctor Pérez le avisa de que vienen curvas: «Su mejora física quizás aumente su rango de tiro. Ahora solo anota en la pintura. A nivel de los contactos, de dureza, puede ir mejorando. Le pegan mucho, tiene que aguantar mucho. Y eso va a ir a más. Las defensas se van a centrar mucho sobre él».

Birutis es piedra angular en el juego de ataque del Obradoiro: «Buscamos el equilibrio interior exterior. Este año es un jugador determinante en poste bajo, eso facilita espacios para los exteriores. Y viceversa. Lo estamos aprovechando y se aprovecha mucho de balones doblados».

Llama la atención sobre un detalle que lo hace diferente: «Se desenvuelve muy bien en poste bajo, con muchas finalizaciones sobre un apoyo. Normalmente buscas sobre dos apoyos, porque dan más equilibrio. A él le vale con uno. Viene más formado, de una liga como la lituana. Su conocimiento del juego es mayor que otros que llegaron más verdes».

TONECHO LORENZO

«Tiene los pies en el suelo». El legendario Tonecho Lorenzo se muestra encantado con la aportación del pívot lituano: «Es una sorpresa agradable para el pueblo liso y llano. Es un jugador que me gusta porque tiene los pies en el suelo, me recuerda mucho a Oriol. Juega de espaldas, maneja las dos manos, finta, tiene pie pivote, saca el balón fuera... Es de brazos largos, y delgado, pero aguanta. Solo salta si hay que poner un tapón, no pierde la compostura. Rebotea por colocación».

También es de los que destaca lo que aporta más allá de sus estadísticas individuales: «Desde Oriol no hubo muchos que tuvieran eso, en estático. Va para un lado, va para otro... Lo controla bien. Se ve que es compañero, generoso».

ALBERTO BLANCO

«Ha ido dando pasos tardías en su crecimiento como jugador». Alberto Blanco sabe lo que es jugar contra Birutis de antes de que recalase en Sar: «Ha sido, nuevamente, un gran acierto de la dirección del Obradoiro, pescando en un mercado asequible como es el lituano y buscando un jugador que diera dos perfiles: ser joven con ganas de crecer y progresar y dar un nivel ACB al juego interior del equipo. Laurynas ha ido dando pasos tardíos en su crecimiento como jugador, es un poco un llamado late bloomer por su constitución física y desarrollo técnico. Ser zurdo le da cierta ventaja en el juego cercano al aro»

MOZAN

«Puede hacer jugar a los demás o jugar él». Mozan también pone el acento en la capacidad de Birutis para generar: «Me ha sorprendido su entendimiento del juego y cómo es capaz de hacer buenos al resto de jugadores. Tanto se puede jugar con él como para con él. Puede hacer jugar a los demás o jugar él. Ofrece esa doble posibilidad»

Otra cualidad que destaca es la versatilidad en la finalización: «Me sorprende la sensibilidad y tacto con las dos manos cerca de canasta. Es francamente bueno. Merece la pena ver cómo gana la posición, a veces ya tan dentro de zona que es imposible que lleguen las ayudas. Su perfil físico es engañoso. No es un gran intimidador ni un gran defensor de uno contra uno. Pero, en ataque, hay que ver como sella a los rivales».

MIGUEL GÓMEZ

«Se le ve feliz jugando». A Miguel Gómez le llama la atención la calidad y el lenguaje gestual con que la acompaña: «Lo que más me gusta de Birutis es la cara, se le ve feliz jugando. Es bueno. Acaba a dos manos, rebotea, va defendiendo. Le cuesta más con los grandes monstruos. Tiene cara de estar contento en el equipo. Sabe ganar la posición y, a medida que Cohen vaya espabilando encontrará otro gran aliado en el pase».

Reconoce que está rindiendo por encima de las expectativas: «Es más de lo que esperábamos, está más hecho. Igual pensamos que venía un Pustovyi, al que había que enseñarle todo. Este viene con mucho más».

Y no olvida que el equipo también ayuda al brillo del lituano a la hora de explotar sus habilidades: «Otra cosa es el trabajo colectivo para que la bola le llegue cuándo le tiene que llegar y dónde le tiene que llegar».