El yin y el yang

Hugo López LA ATALAYA

ANDAR MIUDIÑO

SANDRA ALONSO

20 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El yin y el yang son dos energías opuestas que se necesitan y se complementan. Moncho Fernández y Pablo Laso son diferentes, pero sus ideas de baloncesto se complementan. Igual que el yin y el yang, sus equipos tienen armonía y equilibrio, cada uno con su estilo, fiel imagen de las personalidades de los dos entrenadores.

Los dos me dejaron huella y me aportaron cosas como entrenador y como persona. Con Moncho estuve tres años en Los Barrios en la LEB, y cinco al lado de Pablo en el Gipuzkoa Basket y en el Real Madrid.

Pablo, tranquilo, pausado, feliz paseando kilómetros antes de los partidos, fanático de las series como Breaking Bad o Prison Break para amenizar esos largos viajes por Europa, y más normal en su vida diaria de lo que se observa en los partidos, donde el nervio del vitoriano sale a relucir y su pronto no pasa inadvertido.

El Alquimista Fernández, un apasionado de la enología, casi tanto como del baloncesto. La Euroliga está bastante por encima de la NBA para el compostelano. Devorador de libros con los títulos rebuscados y complejos, como sus sistemas de juego.

Sus equipos tienen ese sello muy particular que deja poso en todos los jugadores que pasan por sus manos. Moncho no deja espacio a la improvisación, a casi nada, detallista, escrupuloso, con todo bajo control. Sus equipos, con menos experiencia y talento, son pulidos meticulosamente año tras año para que la orquesta compostelana, a la que le van cambiando diferentes músicos, siga sonando de manera muy armónica. Los equipos de Laso, rápidos, dinámicos y con mucha libertad, dejan fluir el talento individual de todos los actores, para el disfrute de los espectadores del baloncesto por toda Europa.

Con ambos he vivido los momentos más bonitos de mi carrera baloncestística, pero también he convivido momentos duros y difíciles, donde realmente conoces a las personas. Pablo y Moncho, como el yin y el yang, con sus formas diferentes de afrontar los momentos negativos, lideran a sus equipos hacia el éxito año tras año.