dani: «Tenía el consuelo de poder sonar en las discotecas, pero ahora ni eso»

AL SOL

La cantante viguesa presenta el jueves en Santiago «Veinte», un disco de pop delicado y ensoñador

18 ago 2020 . Actualizado a las 18:03 h.

Tiene 22 años, pero ha optado por llamar a su disco de debut Veinte. La viguesa dani -su nombre artístico, advierte, se escribe todo en minúsculas- ha puesto en circulación una propuesta de pop en la que muchos han visto una suerte de Jeanette moderna. «Me sorprende mucho que lo digan tantas veces. Jeanette es una artista que me parece muy guay pero no es para nada una influencia», dice. El jueves actúa en el ciclo Atardeceres do Gaiás en la Cidade da Cultura de Santiago.

-Escucharla invita a soñar.

-Sí, es una de las características que tienen las canciones que, siendo muy variadas, tienen todas ese punto envolvente y ensoñador. Entre mi modo de cantar y los sintes provocan ese efecto.

-¿El disco fotografía el paso de la adolescencia a la edad adulta?

-Sí, lo llamé Veinte porque refleja mi manera de pensar, mis miedos y mis inquietudes desde hace tres años hasta aquí. Cada canción cuenta diferentes historias que me han marcado y comentan distintos aspectos que me pasan en ese paso a la vida adulta. Cosas que en otro momento no ocupaban mucho en mi cabeza, como el paso del tiempo y la productividad, en los últimos años han supuesto agobios en mí.

-Canta: «A mí no me importa si hace frío o calor / siempre y cuando estés tú para sentirme mejor». Parece pensada para acabar en la vida de unos enamorados que la escuchen.

-[Risas] En principio, no hice los temas con la intención de que se identificase nadie, sino que eran pensamientos que me venían a la mente en un momento concreto. Luego, resultó que mucha gente consigue meterse dentro y sentirse representado. Cuando compongo intento no dejarme influenciar con factores externos, ni pensar en eso.

-El vídeo es onírico y con nubes, un paraíso pop. ¿Hay un punto de escapismo en su música?

-Creo que es bonito ese contraste entre unas letras tan realistas, tan directas y tan cotidianas y un mundo de fantasía. Una canción como Si te vas la escuchas y te vienes arriba. Entras ahí. La creatividad del vídeo ayuda a entenderme mucho mejor.

-En el caso de «Si te vas» empuja a bailarla. En la primera escucha no parece bailable, pero con el vídeo se descubre que sí.

-Sí, esa canción igual de primeras no parece un hit de discoteca. Pero yo me la pongo en casa y lo que me sale es moverme. ¿Si lo hago en casa por qué no hacerlo en ese pequeño mundo que creamos? Entonces decidimos incorporar lo del baile. También para hacerle un pequeño guiño al Tik Tok, que nos hacía mucha gracia.

-Funcionaria en las discotecas si estuvieran abiertas. ¿Ha sido una faena debutar ahora?

-Iba a salir en abril, pero al final salió en julio. Tuve días de estar fastidiada, pero al final decidimos sacarlo igual. Hace un mes aún tenía el consuelo de que podía sonar en algún dj-set de las discotecas, pero ahora ni eso. Me queda un poco de rabia de que tuviera que ser así. Pero, por otra parte, que mi sello siguiera adelante, poder tener atención mediática y que incluso salgan algunos conciertos me hace sentir muy afortunada. ¿Pudo haber salido en una fecha mejor? Seguro. Pero esto es lo que hay y estoy teniendo suerte.

-Su estética «retropop» remite a los setenta. ¿Es casual?

-No, a mí me llamaba mucho esa estética, sobre todo la de las musas francesas de la época. Cuando empezamos mirar eso, recopilé iconos que me inspiraban. Creímos que la estética actual que se puede ver no es la que mejor me representa. Y tiramos por ahí.

-Las críticas hablan de artistas como Frank Ocean o Billie Eilish. ¿Se ve en esa onda?

-Mi música puede tener algún punto en común con muchos artistas. Siempre dicen lo de Billie Eilish por su forma de cantar, suave pero bastante directa. Tengo muchas influencias y mi música tiene muchos detalles de gente que me gusta.

-Procede de una familia ilustre del pop gallego [sus padres son Silvino Díaz y Rosa Costa de Aerolíneas Federales]. Al contrario que otros artistas que prefieren ocultar ese pasado, usted lo pone en su hoja promocional.

-Es una biografía. Todo el mundo lo pregunta y no es nada lo que me avergüence. La época del grupo de mis padres no la viví. Me hace ilusión tener ese pasado familiar, pero lo que hago yo y ellos son mundos totalmente diferentes. A veces es cierto que la gente se olvida de escuchar mi disco y me pregunta solo por eso. Y preferiría que no fuera así. Pero lo que no tiene sentido es ocultarlo o evitarlo.