El paciente fue dado de alta cinco días después de la intervención
20 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Especialistas del servicio de traumatología y cirugía ortopédica del Lucus Augusti practicaron un implante de prótesis de disco intervertebral, el primero de los de estas características que coloca en un hospital gallego un equipo de traumatología. El paciente, un varón de 48 años, fue dado de alta a los cinco días de la intervención, realizada el pasado 26 de mayo. Duró entre cuatro y cinco horas y ya acudió a la primera revisión, donde constataron que estaba todo según lo previsto inicialmente.
La intervención la dirigió Domingo Lombao Iglesias y formaron parte del equipo Manuel Medina, de la misma especialidad, la instrumentista María del Carmen López y la anestesista Silvia Delvalle.
Al paciente que le implantaron la prótesis le habían diagnosticado una hernia discal entre la cuarta y la quinta vértebra cervical. Sentía dolor en el hombro y en el brazo izquierdo, que no era posible controlar con tratamiento conservador, por lo que optaron por la prótesis, en lugar de la técnica clásica, que consiste en realizar una unión entre las vértebras adyacentes, mediante la interposición de un soporte estructural. Éste en el Lucus Augusti suele ser un injerto óseo del propio paciente.
Domingo Lombao explicó que la prótesis de disco, que tiene en la parte central un polímero y dos placas de titanio que están en contacto con el cuerpo vertebral es la posibilidad más próxima al disco humano, que reproduce el movimiento fisiológico del paciente. La ventaja que aporta, según dijo, es que permite un reparto más homogéneo de las cargas y evita la degeneración de los discos adyacentes. Es más cara que la solución que se estaba aplicando hasta ahora, pero supone una mejor calidad de vida al paciente.
Por el momento el equipo no tiene programada ninguna otra intervención de este tipo porque el implante está indicado para pacientes que cumplen una serie de características: joven, sin artrosis y con lesión de componente no óseo y no se ha dado ningún otro caso. Está contraindicada para aquellas personas que padecen osteoporosis o rigidez por atrosis cervical.
Lombao señaló que la prótesis la implantaron, en modelos de la generación anterior del mismo fabricante, en Ourense. Lo hicieron neurocirujanos y no traumatólogos, como fue en el Lucus Augusti.