El apagón analógico llegará a 60 concellos gallegos el 30 de junio

La Voz

TELEVISIÓN

29 mar 2009 . Actualizado a las 03:00 h.

Más de 400.000 gallegos (casi un 15% de la población total) solo podrán ver desde el 30 de junio sus programas preferidos en la pequeña pantalla a través de la televisión digital terrestre. Sesenta ayuntamientos de las provincias de Ourense, Pontevedra y A Coruña están incluidos en la fase 1 del plan nacional de transición, que recoge este fecha para el ya conocido como apagón analógico.

Según el último informe de Impulsa TDT, la asociación en la que participan empresas audiovisuales creada para promover el proceso de transición del sistema analógico al digital, el 41,5% de los hogares gallegos ya cuenta con este sistema. Son datos del pasado mes de febrero que sitúan Galicia ocho puntos por debajo de la media española.

«La cobertura está razonablemente solucionada», responde Andrés Armas, director de Impulsa TDT cuando se le pregunta sobre si la señal llegará a todos los ayuntamiento incluidos en esta primera fase del plan de transición.

Adaptar las antenas

La mayoría de los ayuntamientos que integran esta primera fase están situados en núcleos rurales. Santiago es la única de las siete grandes ciudades gallegas en donde la televisión solo se podrá ver por sistema digital antes del verano.

Y en este nucleo urbano es donde surgen las dudas de poder cumplir los plazos establecidos, por los problemas que implican la adaptación de edificios comunitarios al nuevo sistema. «Es necesario acelerar el ritmo de las instalaciones, ya que la lentitud en la adaptación de la antenas colectivas es un riesgo potencial para la televisión digital terrestre».

Armas se detiene en esta cuestión y recuerda que uno de los errores más frecuentes todavía es que un usuario compre un decodificador de TDT o una televisión con este sistema ya incorporado sin que esté adecuada la antena colectiva. «El primer paso es que todos los vecinos se pongan de acuerdo para llevar a cabo esta adaptación, y luego se contrate un servicio autorizado».

En España hay todavía más de 60.000 edificios en esta situación y en muchos casos disponen de instalaciones muy antiguas en las que la necesidad de adaptación es completa y requieren incluso un cambio total del cableado. Existen 1.300 instaladores homologados repartidos en las principales ciudades españolas, que tienen la obligación legal de emitir un certificado oficial cuando finalizan la adecuación, que sirve como garantía para el consumidor. El coste medio de la adecuación de un edificio oscila entre los 600 y 1.000 euros, lo que supone un desembolso medio estimado de 50 euros por usuario.

El plan nacional de transición prevé otras dos fases más hasta el apagón analógico definitivo. La primera será el 31 de diciembre del 2009 y afectará a ocho millones de usuarios. La segunda tendrá lugar el 3 de abril del 2010, dentro de algo más de un año.