Desde Ayamonte hasta Faro y desde Vigo hasta Viana do Castelo. La amenaza de una inminente clausura de la línea se ha convertido en un polvorín. «Un ataque más de Lisboa», considera el regidor de Viana do Castelo, a «cien kilómetros de frontera en los que hay más actividad que en el resto del país».
Regidores, asociaciones, empresarios. Nadie parece dispuesto a renunciar al servicio y el regidor tudense, Moisés Rodríguez, ha optado por subirse directamente al tren. Él, su equipo de gobierno, así como los representantes del Concello de Valença y otras autoridades, realizarán hoy el recorrido entre estas dos localidades a las que el paso unió hace 125 años para trasladar su rechazo a la supresión.
El regidor y la comitiva comparecerán ante los medios al finalizar el trayecto en la estación de Tui, cuyo único servicio es precisamente el de la Línea del Minho.