El Consello Consultivo emite más de 10.000 dictámenes en sus primeros 15 años

EFE

GALICIA

Por primera vez en su historia se concedieron las Medallas de Oro del organismo consultivo a los integrantes de su primera corporación.

07 jun 2011 . Actualizado a las 22:40 h.

Las distintas administraciones que se dirigieron al Consello Consultivo de Galicia en el 2010 siguieron sus dictámenes en un 95%. El dato referido a la Memoria 2010 de la institución fue resaltado por la presidenta del Consello, María Teresa Conde-Pumpido, en el acto de celebración del XV aniversario del organismo consultivo, que presidió el titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

Además, por primera vez en su historia, se concedieron las Medallas de Oro del Consello Consultivo de Galicia a los integrantes de su primera corporación, José Antonio García Caridad, José María Gómez y Díaz-Castroverde, José Luis de la Torre Nieto, Antonio Carro Fernández-Valmayor y, a título póstumo, Pablo Moure Mariño.

Conde-Pumpido recordó que en sus quince años de vida, el Consello ha emitido más de 10.000 dictámenes y en el 2010 fue requerido para asesoramiento jurídico en 573 expedientes, de los que 459 procedían de la administración autonómica; 109, de la local, y cinco de la universitaria.

Señaló también que en la memoria, que previamente había entregado al presidente de la Xunta, se recoge que en el 78,28 por ciento de los casos el dictámen fue favorable.

María Teresa Conde-Pumpido afirmó que éste no era un acto para reivindicar, pero agregó que «sí creemos que es el mejor marco para asegurar que si los representantes de la soberanía del pueblo gallego consideran útil, en cualquier momento, encomendarnos nuevas funciones de control preventivo, desde ya estamos preparados y dispuestos para asumirlas»

Tanto la presidenta del Consello Consultivo como el portavoz de los premiados, José Antonio García Caridad, resaltaron en sus discursos la independencia de su labor.

La primera dijo que «el único patrimonio que tenemos los consejeros electos, lo que no podemos permitirnos perder, pues no sería recuperable, es nuestro prestigio como juristas: He ahí -agregó- la profunda garantía de nuestra independencia, la única que nos dará autoridad moral para ser escuchados por aquellos que fueron elegidos para decidir».

Por su parte, García Caridad defendió la independencia como «la nota más importante» en momentos en que el poder Ejecutivo representa una «fuerza expansiva» que dispone de «grandes medios para la captación de voluntades».

Finalmente, el presidente de la Xunta subrayó, en referencia a los premiados, cómo trabajaron juntos para ser útiles a Galicia procediendo de «Galicias distintas y visiones dispares de presente y futuro».

Resaltó también el papel del Consello en la «arquitectura institucional» de Galicia y consideró que los premiados son «símbolos del país», que definió como una «comunidad moderna, libre y avanzada, sin conflictos y divisiones internas, no por ser uniforme, sino por integrar la pluralidad».

Concluyó que esa «casa común» es el principal objetivo del proceso autonómico, donde el galleguismo no es solo una construcción teórica, sino la plasmación de la voluntad de los gallegos.