La última jornada del invierno dejó ayer abundantes lluvias en la franja atlántica y vientos que en algunos casos llegaron a soplar a 126 kilómetros por hora, como en Vimianzo. Las precipitaciones fueron notables en los concellos de Santa Comba, con 70 litros por metro cuadrado, y Lousame, donde por la tarde ya se habían acumulado 64 litros. Las comarcas del oeste de Galicia y las Rías Baixas recibieron también bastante agua, según los datos de la red de estaciones de MeteoGalicia.
Ayer se había activado la alerta amarilla por vientos superiores a 80 kilómetros por hora en toda la comunidad. Las ráfagas adquirieron mayor intensidad en A Coruña y Pontevedra, especialmente en Vimianzo (126 kilómetros por hora), Cedeira (123), Lousame (106), Vigo (100) y A Coruña (93).
Las temperaturas sí se movieron en registros más benignos, propios de la primavera, con máximas que se quedaron muy cerca de los 20° en A Coruña y Ferrol, así como en las Rías Baixas. Las mínimas, con la excepción de las zonas de montaña, rondaron los 10°.
Las predicciones dan lluvias generalizadas para hoy en toda la comunidad, aunque mañana y el lunes la situación desembocará en alternancia de nubes y claros, así como cielos despejados localmente. Las temperaturas experimentarán pocas variaciones.