Cultura admite que hubo «erros» en la gestión de la feria del libro de Cuba

GALICIA

31 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La Consellería de Cultura reconoció ayer que se cometieron «erros e fallos» al planificar su participación en la feria del libro de La Habana, celebrada el pasado mes de febrero y que tuvo como invitada de excepción la literatura gallega. El director xeral de Creación e Difusión Cultural, Luis Bará, compareció ayer en el Parlamento para rendir cuentas del viaje, al que fueron invitados más de 200 escritores, editores y artistas, y que fue tomado por la Xunta como especie de laboratorio de pruebas para afrontar «retos máis grandes» en la escena internacional.

La comparecencia de Bará arrancó marcada por las acusaciones del diputado del PP Ignacio López-Chaves, en las que asegura que Cultura gastó en este evento «bastante máis» que los 1,3 millones de euros que declaró la Administración. De hecho, aseguró que la suma de las facturas remitidas a la Cámara ascienden a 900.000 euros, pero advirtiendo que existen infinidad de conceptos que no se han contabilizado. «¿Qué quieren ocultar?», se preguntó.

Con tono sosegado y firme, Bará explicó que su departamento es consciente de que al organizar la feria se cometieron «erros e fallos que hai que corrixir», algunos vinculados con las limitaciones que existen en Cuba para disponer de algunos medios técnicos y otros, dijo, con la inexperiencia de Galicia en la organización de este tipo de eventos.

En cualquier caso, restó trascendencia a algunas facturas que salieron a la luz, especialmente la relacionada con la recepción en un hotel en la que se sirvieron 400 mojitos pagados con fondos públicos, y adujo que ese fue el único acto de esas características financiado por la Xunta en La Habana, pues otra recepción similar corrió a cargo de la Embajada de España.

Bará convino que, en lo sucesivo, la consellería deberá «mellorar a previsión e planificación» para afrontar la participación en eventos todavía mayores en los que la creación gallega será invitada de lujo, como son los salones del cómic de Angulema (Francia) y Barcelona, el festival internacional marítimo de Brest o el Intercéltico de Lorient.