La concejala de Urbanismo acusa al PP de promover la violencia, y este le reprocha que fue elegida a dedo

La Voz

GALICIA

12 feb 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Las sospechas de la concejala de Urbanismo Carmela Silva de que el PP pudiera estar detrás de la violencia generada sobre este asunto indignaron a la oposición y llevaron la polémica por otros derroteros ajenos al tema que se trataba.

El concejal del PP, José Manuel Figueroa, le recordó que estaba llamando violentos a quienes han sido elegidos por los ciudadanos, algo que no era precisamente su caso. «Solo tiene un mérito, ser designada a dedo por el alcalde; usted sabrá por qué fue designada a dedo».

Tales declaraciones fueron interpretadas por Carmela Silva como «insinuaciones de carácter sexista», e inmediatamente ofreció una rueda de prensa rodeada de sus compañeras de grupo para repudiarlas públicamente. Incluso llegó a lanzar una llamada a Corina Porro para que pida su dimisión.

Muy al contrario, la reacción de Porro fue criticar que se tratase de utilizar temas tan delicados para desviar la atención de lo que realmente estaba ocurriendo. «Me parece una maniobra vergonzosa», advirtió la ex alcaldesa de Vigo. A su juicio, la responsable de Urbanismo se siente acorralada políticamente y busca refugio en las concejalas de su grupo para intentar despistar sobre el fondo del asunto. «Estoy segura de que algunas [de las concejalas] comparecieron por disciplina, no porque lo sientan así, porque unas veces las ningunean y otras las utilizan, y eso sí que es una actitud misógina», concluyó.

Las denuncias del pleno que aprobó el Plan Xeral no se limitan solo a la vía judicial. El Valedor do Pobo y el del Cidadán también investigan los hechos.

Lejos de pedir disculpas por la actuación, ayer el gobierno municipal se escudó en la Policía Local para asegurar que la presencia del público en el pleno se produjo por orden de llegada y la sesión se celebró con plena libertad, sin limitación alguna.

«Todos somos el alcalde y el concejal de Seguridad, y si se hacen afirmaciones tienen que estar basadas en pruebas», advirtió Carmela Silva, la que más empeño puso en la defensa de ambos políticos.

Explicó que, según los agentes, había personas dispuestas a generar violencia y que los asientos vacíos estaban reservados a los periodistas, pese a encontrarse estos situados en la parte reservada al público.