Rosberg, Hamilton y Schumacher fueron los mejores en los libres, en cuyas sesiones Alonso fue segundo y noveno
13 mar 2010 . Actualizado a las 02:09 h.Los motores de Mercedes marcaron el paso en los ensayos libres del Gran Premio de Bahréin. La marca alemana suministra el corazón de los coches que ayer firmaron los cuatro mejores cronos de la jornada. Nico Rosberg (Mercedes) dominó con un registro de 1.56,766, un tiempo que ayer no pudo rebajar nadie. El que más se le acercó fue Lewis Hamilton (McLaren), con una marca de 1.55,854. A continuación, Michael Schumacher (Mercedes) y Jenson Button (McLaren). Los mejores tiempos fueron cosechados en la segunda sesión, en la que Fernando Alonso (Ferrari) acabó noveno. En su primera toma de contacto con el asfalto de Sakhir finalizó segundo. En esa sesión inicial solo fue superado por el Force India de Adrian Sutil, también propulsado, cómo no, por un motor Mercedes.
En el cronómetro tomó forma la gran fractura existente entre los equipos consolidados en la parrilla y los debutantes. Un abismo de 11 segundos separó la mejor marca de Rosberg de la de Bruno Senna (Hispania). Pero el triunfo de la escudería española no es correr veloz. Es simplemente correr. Y Senna completó 16 vueltas. El equipo fue a Bahréin sin haber probado sus coches en los test de pretemporada. El indio Karun Chandhok no pudo salir ayer a pista y estrenará su monoplaza en la jornada de hoy.
De la Rosa y Alguersuari
Pedro Martínez de la Rosa (Sauber) fue décimo en la segunda tanda y cree que la Q3 está cara para él. Y Jaime Alguersuari, con un noveno y un decimosexto puesto, no encuentra el feeling que tuvo con su Toro Rosso en Jerez.
Pero ayer todo fueron conjeturas. Cargas de gasolina y neumáticos. Lo que se expone y lo que se esconde. La calificación (12.00 horas, La Sexta ) ofrecerá hoy un retrato más fiel a la realidad. Entrará en escena una de las novedades del reglamento. Aquellos que alcancen la Q3 usarán los mismos neumáticos en esa tanda y en el comienzo del gran premio. Esta norma obliga a los mejores a salir en carrera con neumáticos blandos, que serán castigados por el gran peso del combustible. Mientras, los rezagados podrán iniciar la prueba con las gomas duras, con lo que retrasarán su parada. Otra vuelta de tuerca para pilotos y escuderías.