Mateo Míguez y Oriol Riera son dos de los grandes protagonistas de la proeza celeste en El Madrigal. Llegaron a Castellón a última hora, sin poder entrenar con el primer equipo por la demora en su viaje, y creyendo que sus opciones de jugar eran casi nulas. Al final el primero fue titular, y el segundo salió en la última media hora del partido. Ambos vivieron su estreno soñado con el primer equipo pero este fin de semana, probablemente volverán al filial, y su destino será Zamora y no medirse al líder de Segunda, la Real Sociedad, en Balaídos.
«Fue un éxtasis al final por como transcurrió el partido. En el vestuario se desbordó una alegría inmensa porque se han pasado momentos muy difíciles en esta temporada», comentó Mateo. Para el redondelano este logro supondrá un gran espaldarazo para la cantera. «Íbamos con la esperanza de hacer algo grande pero esto es una machada con mucha gente de la cantera y del filial, y ellos jugando con los mejores».
Sin haber entrenado
Mateo debutó sin haber entrenado antes con el primer equipo. Por eso admite que le extraño más verse en el once inicial. En el avión que juntos tomaron camino de Villarreal ambos iban comentando que el no entrenar por la nevada caída en Madrid les restaba opciones de jugar o incluso de estar en el banquillo. Por eso su sorpresa fue mayúscula. «Al final hicimos algo grande y fue una gran alegría», señala el rendodelano.
Oriol por su parte era más ambicioso y afirmaba que siempre creyó en las opciones de lograr la victoria. El resultado de la ida nos daba posibilidades de hacer algo grande. Me hace más ilusión aún por el hecho de empezar la jugada del penalti. Lo importante es el resultado y que se pasó».
El delantero pudo jugar en El Madrigal porque no prosperó el recurso por la sanción a Joselu. Ahora con el Silleda de vuelta al equipo, lo lógico es que el catalán de Vic se vea este domingo otra vez con el Celta B con el que ha logrado siete goles en este campeonato. «Esta temporada tanto con el filial como con el primer equipo me están saliendo muy bien las cosas».
Para Oriol, la dirección que ha tomado el club vigués en esta temporada es muy ilusionante para los jóvenes. «Eusebio y el club están apostando por la cantera y esto para los que estamos en el filial es una muy buena noticia».