28 ago 2008 . Actualizado a las 02:00 h.
Split homenajeó al Deportivo como forma de corresponder con A Coruña, la ciudad que en 1992 sirvió de escenario para los partidos del equipo de baloncesto Slobodna Dalmacija como local en la competición europea. Así, el Coliseo se convirtió en la cancha croata por culpa de la guerra de los Balcanes y hombres como Velimir Perasovic tuvieron que exiliarse.
El homenaje consistió en una cena oficial a la que acudió el alcalde de Split y el presidente del Slobodna, ahora denominado Korsakarski. Y hoy, minutos antes del encuentro, el alcalde entregará a los representantes del Deportivo unos regalos como agradecimiento al pueblo herculino.