La nefasta relación con el trencilla nació con una más que polémica actuación ante el Las Palmas
PONTEVEDRA
Arias López se dio a conocer con una nefasta actuación ante el Las Palmas el 30 de abril del 2006 en Pasarón. El Pontevedra quedó muy tocado después de ese encuentro porque la injusta y polémica derrota por 0-1 complicó sus aspiraciones de colarse en la fase de ascenso. El cántabro la armó muy pronto, a los dos minutos con una expulsión de Luciano por derribar al canario Alejandro. El trencilla interpretó que era el último hombre y que se trataba de una ocasión manifiesta de gol. Fue muy riguroso. Lo más normal habría sido dejar la acción en una amarilla.
Pero la cosa no quedó ahí porque a los 43 minutos se cargó el partido con la segunda expulsión local. En esta oportunidad, el damnificado fuera Cabrera por doble amonestación. Sin comentarios.
El titular de La Voz de Galicia fue muy explícito: «El árbitro perjudicó al Pontevedra ante un Las Palmas acobardado». Esa misma página recoge que desde la grada se gritó el «manos arriba, esto es un atraco». Y en un textillo se analizaba su actuación: «No fue imparcial. Tuvo distintas medidas a la hora de amonestar e incluso expulsar». Al día siguiente Nino Mirón aseguró que «el arbitraje con el Las Palmas es, como mínimo sospechoso» y Argibay declaró que el Pontevedra «jugó contra doce».
El equipo granate logró su único punto con Arias López 8 de abril del 2007 ante el Puertollano en Pasarón (0-0). No influyó en ese resultado, pero si lo hizo el 6 de octubre en Lugo. Se tragó un penalti a Gato y señaló otro de Castaño, al que expulsó en la primera mitad.