El Pontevedra derrota al Portonovo en un partido soso, aburrido y sin ocasiones de gol
PONTEVEDRA CIUDAD
El Pontevedra sumó su segundo triunfo consecutivo frente al Portonovo en el Campo de O Baltar y se hizo con el Trofeo Hermanos Suárez Torres. Lo más positivo fue el resultado porque el partido fue malo de solemnidad y apenas se pudieron extraer conclusiones positivas.
La primera media hora sirvió para poner a prueba la paciencia de los aficionados. Los dos equipos taparon las vías de acceso a su portería y las ocasiones brillaron por su ausencia. El descanso se aproximaba y no había el más mínimo indicio de que pudiera moverse el marcador.
Sin embargo, de repente el Pontevedra sacó a relucir su potencial. Charles dio el primer aviso al rematar de volea un centro desde la izquierda. Marcos desvió el esférico a córner en una buena intervención. El saque de esquina lo realizó Danilson, Toni tocó de cabeza en el segundo palo para que Charles marcara a placer con la testa. Era el minuto 35. Y cinco después, el conjunto granate encarrilaba el duelo con el 0-2. Cubas fue su autor al aprovechar un pase de Yuri. El canterano cruzó la pelota ante la salida desesperada de Marcos, que se encontraba un poco adelantado. Así se llegó al intermedio.
La segunda mitad se presentaba más animada. El que más y el que menos pensaba, con buena lógica, que el Portonovo abriría líneas en busca de recortar diferencias y eso haría que se viera un encuentro más entretenido. Sin embargo, el fútbol pocas veces cumple las previsiones y el aburrimiento volvió a ser la nota predominante.
El conjunto local no arriesgó nada, se mantuvo metido en la cueva, cerró todos los espacios y el Pontevedra, que tampoco tenía porque arriesgar, fue incapaz de llegar hasta los dominios de Marcos. Al igual que en el período inicial, el centrocampismo, los robos de balón y las continuas pérdidas se erigieron en protagonistas hasta el último cuarto de hora.
El Portonovo ofreció su único destello ofensivo en un remate cruzado de Suso Bea desde la izquierda que se marchó rozando el palo de Saizar. La acción arrancó los aplausos de los sufridos aficionados que no esperaban encontrarse con un espectáculo tan gris.
La respuesta del Pontevedra llegó a continuación con un potente disparo fuera de Yuri, que participó muy poco en el juego ofensivo del equipo.